Durante la inauguración del invernadero del Grupo Ganfer, el gobernador Francisco Domínguez Servién, destacó que el impulso entre Guanajuato y Querétaro consolidó la región del Bajío como referente nacional de empleo, educación, tecnología y competitividad en diversas ramas.
“Guanajuato y Querétaro unen una historia y un destino. Compartimos caminos, recursos naturales y vocaciones”, dijo el mandatario acompañado de su homólogo, Miguel Márquez Márquez.
Añadió que una de las vocaciones históricas y sociales que comparten Querétaro y Guanajuato es la agricultura, en donde se trabaja coordinadamente por contar con campos modernos vinculados por medio de una triple hélice con las universidades y centros de investigación; sumando esquemas gubernamentales de aceleración y emprendimiento; más la fuerza productiva de las empresas.
Este trabajo, precisó, ha dado un sector que conquista más allá de las fronteras estatales y nacionales, que forma campos con buenos rendimientos y una justa distribución para la gente que los trabaja.
Acompañado del secretario de Desarrollo Sustentable, Marco del Prete Tercero, el gobernador refirió que esa convicción ha sido compartida desde el 2004 con la empresa mexicana Ganfer, que siembra semillas de evolución, con invernaderos de alta tecnología.
El mandatario recordó que en 2017 su gestión firmó un convenio con Grupo Ganfer para integrar a más de 21 productores a sus cadenas. Gracias a este esquema, fue posible abrir más de 70 empleos en invernaderos sociales, y hoy 45 familias beneficiadas están produciendo y vendiendo, en pesos y en dólares, más de 105 toneladas de productos de primera calidad.
En Querétaro se impulsaron más de 360 hectáreas de agricultura. Durante 2016 y 2017 se apoyaron a más de 300 productores para la instalación de 101 invernaderos; sumando el apoyo de 11 extensionistas y una inversión de 29.44 millones de pesos.