En el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Delegación Querétaro, se calcula que en los últimos cinco años se ha presentado un incremento de casi 20% en la atención médica de derechohabientes con alguna enfermedad derivada del alcoholismo.
El doctor Sergio Avelino Ramírez López, adscrito a la Coordinación Auxiliar de Primer Nivel de Atención, dijo que actualmente el alcoholismo es considerado como una enfermedad crónica, por lo que a nivel institucional está ubicado como el sexto motivo de ingreso hospitalario, después de la diabetes mellitus, hipertensión arterial y las respectivas complicaciones de estas.
“Las bebidas alcohólicas son adictivas y por lo regular la persona empieza como bebedor social, sin embargo, el organismo comienza a pedir cada vez más, lo cual causa lesiones, principalmente, a nivel hepático”, señaló.
Indicó que las patologías que regularmente están asociadas con el consumo de alcohol son: gastritis, que va de ligera a grave con sangrado; úlcera gástrica; así como la más severa, cirrosis hepática, la cual desarrolla daño en el hígado.
Detalló que esta última es la principal causa de muerte derivada del alcoholismo, ya que el hígado se cicatriza y se encoge, y al ser un órgano vital para el funcionamiento del cuerpo, provoca sangrados internos difíciles de contener.
Debido a que en los últimos años se ha incrementado el consumo de alcohol en menores, sobre todo en mujeres, el IMSS recomienda adoptar medidas para evitar la ingesta de bebidas embriagantes en edades tempranas y con ello prevenir la aparición de enfermedades que pongan en riesgo su salud.