México se convirtió en el tercer país de Latinoamérica en legislar la violencia obstétrica, afirmó la diputada federal María Alemán Muñoz Castillo.

La legisladora recordó que, a iniciativa suya, la Cámara de Diputados aprobó    hace unos días, una ley con la que se elimina la violencia obstétrica entendida como: “practicar partos por cesárea, existiendo las condiciones para realizar un parto natural, sin el consentimiento voluntario, expreso e informado de la mujer; y obligar a parir acostada o inmovilizada”.

También se considera violencia obstétrica cuando se niega u obstaculiza la posibilidad de cargar y amamantar al bebé inmediatamente al nacer; y no atender oportuna y eficaz las emergencias obstétricas.

La Encuesta Nacional Sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares 2016 revela que 42.5% de las mujeres consultadas tuvieron cesáreas innecesarias.

La encuesta se realizó a 8.7 millones de mujeres que tuvieron un parto entre el 2012 y 2016, de las cuales 33.4% denunciaron que vivieron maltrato al momento de recibir atención médica, que se les negó la anestesia, recibieron gritos, regaños, retrasos en la atención, presión para que aceptaran métodos anticonceptivos, esterilización involuntaria, y firma involuntaria de consentimientos, entre otras.

Acompañada por legisladoras locales de su partido, así como de Graciela Juárez Montes, secretaria general del Comité Estatal del PRI, enfatizó que no se debe normalizar la violencia obstétrica, e incluso los profesionales de la salud no saben que la cometen, lo que se refleja en que en Querétaro no existen denuncias formales, pese a que todos conocen a alguien que sufrió alguna situación.

Llevarlo a la práctica

Abigail Arredondo Ramos, coordinadora del grupo legislativo del PRI en la 59 Legislatura reconoció que la violencia obstétrica aumenta conforme más alejada se encuentra la comunidad.

Señaló que falta que el gobierno estatal implemente campañas de difusión, porque la normatividad de Querétaro establece protocolos ante la violencia obstétrica, y las mujeres no deberían, simplemente, irse con su coraje, sobre todo porque en Querétaro existen cinco tipos de violencia tipificada, con nueve modalidades, y se busca incluir la violencia digital.

Entre los tipos de violencia se encuentran: carecer de infraestructura para que no parir acostada, posición que provoca un parto más doloroso; obligarla a amamantar cuando no está en condiciones idóneas; y no proporcionar información sobre el procedimiento que se les realizará.

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