Por incumplir con lineamientos contra Covid, autoridades suspendieron la asamblea del partido Querétaro Independiente, en la que se platicaría el método para definir los candidatos.
La suspensión se realizó tras una manifestación en la que militantes acusaron a la dirigente estatal y diputada local María Concepción Herrera de mentirosa, corrupta e ir en contra de los estatutos del partido.
La sesión resultó controversial, pues, además de suspenderse por las autoridades gubernamentales, se impugnó ante el Instituto Electoral del Estado Querétaro (IEEQ).
María Elizabeth Ramírez Vargas, secretaria de organización del Comité Ejecutivo estatal de Querétaro Independiente, sostuvo que la asamblea era ilegal, ya que ella debió firmar la convocatoria para que fuera válida.
El 14 de noviembre, a través de terceros, se enteró que se realizaría la asamblea el día 15, pese a que supuestamente la convocatoria se publicó el 30 de octubre. Denunció que su firma, con la cual se respaldó la convocatoria, fue falsificada.
Entre las anomalías que reportó al IEEQ, se encontró que el partido que preside María Concepción Herrera no ha sesionado por dos años y que en la convocatoria Christopher Servín Herrera, hijo de Herrera Martínez, se ostenta ilegalmente como consejero estatal del partido.
Que la difusión de la convocatoria fue igualmente ilegal, pues únicamente se turnó a algunos de los consejeros, esto a través de mensajes que la presidenta y su hijo enviaron a través de celular y correo electrónico.
También denunció haber sufrido violencia de género de Servín Herrera.
Por las irregularidades denunciadas, solicitó al IEEQ designar a personal del instituto para que acudiera a las instalaciones del hotel en el que se programó la asamblea y la suspendiera.