El Congreso de Querétaro destinará un mínimo de 4 millones de pesos en finiquitos para más de 100 trabajadores que acabarán sus funciones con la llegada de la nueva legislatura, informó Guillermo Vega Guerrero, presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo).
Este proceso se enmarca en la transición política cuando los actuales diputados entreguen el control a sus sucesores y parte de los trabajadores terminarán funciones.
Según Vega Guerrero, el objetivo principal de este movimiento es evitar que la nueva legislatura herede cargas laborales, un hecho que considera fundamental para un inicio sin complicaciones.
“No queremos que los nuevos diputados reciban sorpresas ni guardaditos, como a veces sucede en estos cambios”, explicó, asegurando que la decisión se tomó para garantizar un proceso de transición transparente y equitativo. Los más de 100 trabajadores contaban con contratos por tiempo determinado, por lo que recibirán finiquitos conforme a la ley, no liquidaciones.
“Todos tenían contratos por tiempos determinados, por lo tanto lo que procede es un finiquito, no una liquidación”, aclaró el presidente de la Jucopo. Este proceso se ha realizado siguiendo los lineamientos del Tribunal de Conciliación y Arbitraje, para asegurar que todo se lleve a cabo dentro del marco legal correspondiente.
Aunque el monto total del gasto no ha sido revelado en su totalidad, Vega indicó que las cifras individuales de los finiquitos varían entre 40 mil y 70 mil pesos, dependiendo del tiempo de servicio de cada trabajador.
“Hay empleados que recibirán entre 40 mil y 50 mil pesos, y en algunos casos los montos más altos llegan a los 70 mil pesos, pero no son liquidaciones, son finiquitos”, reiteró.
La administración actual del Congreso considera que esta estrategia ayudará a evitar posibles demandas o litigios costosos que podrían derivarse de no seguir un proceso de finiquito adecuado.
“En el pasado, juicios de este tipo han resultado muy caros para el Congreso, por eso esta vez se tomó la decisión de prevenir complicaciones legales”, añadió Vega Guerrero.
Además de los trabajadores sujetos a finiquito, existen otros empleados del Congreso que cuentan con protección del Servicio Civil de Carrera y no se verán afectados por este proceso.
“Muchos de los trabajadores que permanecerán son del sindicato o están protegidos por el Servicio Civil de Carrera, por lo que su situación es distinta”, precisó el funcionario.
En cuanto al impacto de esta medida en los partidos, Vega Guerrero aseguró que el proceso es imparcial y no favorece a ninguna bancada.
“No se quiso dejar un Congreso lleno de colaboradores que pudieran generar suspicacias entre los partidos”, comentó el legislador panista.