La diputada local y presidenta de la Comisión de la Familia y Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes, Mariela Moran Ocampo, presentó una iniciativa de ley que busca prohibir los castigos corporales y humillaciones a menores de edad.
Esta iniciativa pretende armonizar la ley local para prohibir conductas violentas y garantizar el pleno goce y respeto de los derechos humanos de niñas, niños y adolescentes, para protegerlos contra toda forma de violencia, maltrato, perjuicio, daño, agresión, abuso, venta, trata de personas y explotación o cualquier acto que transgreda la integridad física de este sector de la población.
“[Es una pena] para nuestro estado y para nuestro país, un país donde desafortunadamente seis de cada diez, niñas, niños y adolescentes han experimentado la violencia, mas de 14.000 de éstos ingresan a hospitales por maltrato y dos mueren diariamente a causa de la violencia, estos datos, entre otros, llevan a México a ocupar el penoso segundo lugar a nivel mundial de maltrato infantil”, señaló la legisladora panista.
“Hoy se requiere que entendamos, dimensionemos y visitemos que esta problemática se encuentra mucho más cerca de lo que imaginamos de nuestros niños, madres, padres, padrastros, familiares cercanos, cuidadores, entrenadores y maestros, entre otros”, acotó.
“Muchos llegan a ser los principales agresores y responsables de que las niñas y niños tengan un menor rendimiento escolar, menores habilidades para relacionarse con los demás, mayor predisposición una conducta, la conductas sexuales y responsables o al uso indebido de drogas”, argumentó la diputada.
El objeto de la iniciativa es reformar el artículo 310 y el segundo párrafo del artículo 418, ambos del Código Civil del Estado de Querétaro.
Así mismo, se reformaría el segundo párrafo al artículo 43; la fracción III del artículo 98; se adicionarían las fracciones IV BIS y IV TER al artículo 4; todos de la Ley de los Derechos de las Niñas, Niños y Adolescentes del Estado de Querétaro, para prohibir los castigos corporales, castigos humillantes, crueles e innecesarios que arriesguen la integridad física y emocional, vulnerando los intereses de las infancias.