Francisco Domínguez Servién, gobernador de Querétaro, se pronunció en contra de la criminalización de las mujeres por aborto, pero consideró negativa la Ley de Amnistía que avaló la Cámara de Diputados federal.
El mandatario pidió al Senado de la República frenar esta iniciativa que iría en detrimento de la seguridad del país.
El dictamen que aprobó el pleno de los diputados implicaría la salida de prisión de las personas que hayan sido sujetas a acciones penales, procesadas o que se les haya dictado sentencia ante los tribunales del orden federal.
“Yo estoy a favor de que no se debe criminalizar a la mujer (…) de lo demás lo repruebo, estoy en contra de ella y espero que se detenga, fuera del aborto, esta ley. Esta iniciativa ya pasó en la Cámara de Diputados y esperemos que sea frenada en el Senado”, mencionó Domínguez Servién.
El riesgo, explicó, es que se dé reincidencia, y muchos de quienes pudieran ser liberados, nuevamente vayan en contra del bienestar de las familias y los habitantes del país.
De acuerdo con la estimaciones de los legisladores, serían alrededor de 300 mil personas privadas de la libertad los que se beneficiarían de esta amnistía.
Son diferentes los supuestos en los que las personas vinculadas o procesadas serían beneficiadas con esta medida. Es el caso de las mujeres presas por aborto, aunque sólo para quienes no han recibido condena, pues se clasificará como delito no grave para que las mujeres en situación de vulnerabilidad y pobreza no sean afectadas.
También entrarían en el supuesto las mujeres involucradas en delitos contra la salud en la modalidad de posesión o transporte de narcóticos, o que hayan sido para fines similares, lo mismo para jóvenes que estén en el mismo caso y que no hayan participado de hechos violentos, esto al considerar que pudieron ser presionados o amenazados para competir los delitos.
También considera a quienes cometieron robos sin violencia, de personas orilladas a delinquir por pobreza, a quienes tengan alguna discapacidad e indígenas, y quienes tengan un proceso que no se apegó a derecho.