El analista Héctor Parra advirtió sobre el vacío legal que existe en el Poder Legislativo de que no existen sanciones claras en la ley para los legisladores que no cumplan con los plazos establecidos en la conformación de las comisiones de dictamen.
Señaló que “la ley es imperfecta y no se les impone ninguna sanción”, lo que permite que la inacción persista sin consecuencias para los involucrados.
Al respecto, el diputado Paul Ospital coincidió con Parra de que le corresponde al PAN convocar a una mesa de trabajo. “Por supuesto que hay relación y comunicación con Memo Vega, quien es diputado del PRI y del PAN (pues ambos partidos respaldaron su candidatura), sin embargo, no ha convocado a la Junta de Coordinación Política. Este tiene que, al final del día, por ley, el partido que recibió mayor cantidad de votos”, explicó Ospital, y agregó que la fecha límite para convocar a reunión fue el jueves 10 de octubre.
Esta falta de acuerdo entre los partidos ha impedido la conformación de las comisiones, afectando la capacidad del legislativo para operar y tomar decisiones clave. Parra subrayó que la conformación de comisiones y nombramientos de directores debe basarse en consensos, señalando que “cuando hay voluntad política, lo más sencillo es que todas las comisiones queden pluralmente conformadas”.
También dijo que las negociaciones para la repartición de poder dentro de la Legislatura suelen llevarse a cabo de manera informal y fuera del escrutinio público. “Esto podría dar lugar a presiones o acuerdos poco transparentes”, y subrayó la necesidad de que estas discusiones sean públicas. “Sería lo ideal, pero no están acostumbrados a tratar asuntos de interés público”.
La inacción ha dejado a la Legislatura sin la capacidad de dictaminar propuestas y atender asuntos administrativos, lo que podría tener un impacto negativo en su operatividad, recordó el analista. “Hay un vacío en el ejercicio de las funciones legislativas”, y resaltó que sin comisiones conformadas, las actividades se ven limitadas.
En conclusión, la actual situación en la Legislatura refleja no solo un vacío legal, sino también una falta de compromiso de los partidos para trabajar juntos y cumplir con su función. Sin sanciones ni mecanismos claros para asegurar el cumplimiento de plazos, la inacción podría continuar, afectando gravemente la operatividad y eficacia del Poder Legislativo.