En un plazo de entre 30 y 60 días la Comisión Nacional de Aguas (Conagua) daría a Querétaro la asignación del agua que le daría luz verde al proyecto del Acueducto III, cuando se comenzaría a buscar el financiamiento para este proyecto, informó el gobernador Mauricio Kuri González.
Señaló que así como el tema de movilidad, desarrollo social y energía, el abastecimiento del agua es otro de los retos a los que se enfrenta el estado, para lo que se planteó construir el Acueducto III, proyecto ejecutivo que ya fue entregado a la Conagua para que otorgue el visto bueno y se iniciarán pláticas con la Comisión Federal de Electricidad (CFE), pues por el punto de donde se busca traer el agua, se debe de tener el visto bueno de Comisión también.
“Vamos muy bien, yo espero tener la asignación del agua pronto; es decir, en 30-60 días y a partir de eso comenzar a buscar el financiamiento. El Acueducto II se termina de pagar en los próximos dos años; es decir, lo ideal sería, casi, casi terminar uno y empezar con el otro, pero lo más importante es tener el agua”, informó.
El mandatario señaló que lo más importante de este proyecto es poder traer el agua hacia Querétaro, pues “lo más caro es no tener agua”, como se ha visto ya en estados como Nuevo León donde se tienen problemas serios de agua y Querétaro este año “logró pasar bien” el periodo de estiaje; sin embargo, los niveles de almacenamiento de las presas disminuyeron hasta 5%.
“Independientemente de cualquier cosa, sí pediría poder garantizar para Querétaro el agua para los próximos 50 años”, agregó.
El proyecto del Acueducto III, cabe recordar, se estima que costará entre 6 mil y 8 mil millones de pesos, lo que permitirá traer el agua desde la presa de Zimapán, inyectando tres mil litros por segundo adicionales para la zona metropolitana de Querétaro y para los municipios de Ezequiel Montes, Tequisquiapan, Colón, Pedro Escobedo, todo el corredor por donde atravesará el acueducto.
De acuerdo con información de la Comisión Estatal de Aguas (CEA), el consumo de agua de la zona metropolitana de Querétaro aumentará un 25% en los próximos ocho años y 75% para 2050, de ahí la necesidad de crear infraestructura que ayude a abastecer la demanda que representa el crecimiento poblacional del estado.