No se descarta que el gobierno estatal se endeude para el ejercicio fiscal de 2023, adelantó el gobernador Mauricio Kuri González.
“En este momento no lo tenemos contemplado, pero no lo descarto, quiero ver cómo viene el programa, los gastos. Tenemos una gran cantidad de obras que vienen en camino, hasta no ver bien el tema de los gastos, no quiero adelantarme, hasta que no lo vea con el secretario de Finanzas”, explicó.
El mandatario aseguró que a los rubros a los que se les dará prioridad son seguridad, agua, energía, infraestructura y programas sociales.
Para este 2023 también se incluye una partida para las secretarías del Medio Ambiente y del Emprendedor, dependencias de las cuales ya tiene a los titulares, pero no quiso nombrarlos, ya que reconoció hará algunos cambios.
Actualmente el gobierno del estado no tiene deudas por saldar con ninguna institución financiera ya que la administración anterior liquidó todo antes de terminar su periodo, por una suma de 144 millones de pesos, además se hizo la liquidación de los proveedores, por lo que Kuri González inició con deuda cero y el reconocimiento de diversas entidades por el excelente manejo de recursos por el gobierno saliente.
Respecto al incremento de 30% que posiblemente el Tribunal Superior de Justicia del estado podría tener, Kuri González reconoció que todos los órdenes de gobierno requieren de más recursos, porque hay más necesidades.
“Hay que ser muy inteligentes en ahorrar y en invertir en todo lo que se pueda (…) En la parte judicial también necesitamos una mayor inversión para que se pueda tener mejor justicia y mejores lugares para trabajar”, enfatizó.
Recalcó que por el resto de su administración no volverá a haber reemplacamiento, y en declaraciones anteriores adelantó que no habrá nuevos impuestos para el próximo año.
A principio de 2022 Kuri González anunció el programa de reemplacamiento vehicular, el cual generó molestias entre los queretanos, por lo cual tuvieron que hacer adecuaciones con facilidades de pago, como diferirlo a tres meses, además de aplazar el tiempo permitido para no generar recargos en el refrendo.
El canje de placas estaba planeado de abril a junio, pero se amplió hasta el último día de septiembre, para que así todos los que hicieron el cambio pudieran recogerlas en los diferentes puntos distribuidos en la Zona Metropolitana.