El presidente estatal del PRI, Jorge Meade Ocaranza, urgió al gobierno federal a que modifique su estrategia de seguridad, pues no sólo no está funcionando, sino que esa violencia virulenta que genera ya impacta a Querétaro.

La clara prueba de que la estrategia nacional está fallando son las muertes que diariamente se reportan dentro de una violencia nunca antes vista.

Consideró que la situación fue provocada por “un gobierno improvisado” qué únicamente está enfocado en tratar de cambiar diferentes programas para “poner su sello, en lugar de generar una verdadera estrategia que combata la inseguridad y reconstruya el tejido social.

Un elemento indispensable para actuar en beneficio de la población es tener diagnóstico por comunidades, en el que tal vez se demuestre que en vez de más policías, lo que se requiere son más acciones a favor del sano desarrollo de la población, de la generación de empleo digno o la instalación de más luminarias.

En visita a Querétaro, Monserrat Arcos, dirigente nacional del Organismo Nacional de Mujeres Priístas (ONMPRI), urgió a que gobierno federal elabore estrategias conjuntas con los gobiernos estatales para contrarrestar la inseguridad creciente, medidas que deben estar muy por encima de cualquier diferencia que se pueda tener ante administraciones emanadas de partidos políticos diferentes.

Dijo que las situaciones de inseguridad que se tienen en Querétaro son el “remanente” de lo que ocurre en el país desde hace años.

En este punto dijo lamentar que en los últimos meses se observa un “recrudecimiento” de los actos delictivos en la Ciudad de México, ante el repunte en robos y secuestros exprés.

Remarcó que es desde el gobierno de la República se requiere de una estrategia que permita garantizar la tranquilidad en el país.

No se debe permitir que se replique lo que ocurre en Torreón, donde, en vez de alarmarse, los habitantes ya se acostumbraron a la violencia, a tal grado que ya desarrollan su vida de manera regular ante balaceras y se limitan a compartir información respecto a qué calles se deben evitar cuando ocurren esos hechos de violencia.

Enfatizó que lo realmente necesario es que desde el gobierno federal se encabece el trabajo necesario para garantizar una mejor calidad de vida.

En otro orden de ideas, Meade Ocaranza rechazó abordar las críticas que Juan José Ruiz Rodríguez realizó contra el proceso de elección de presidente estatal, toda vez que se trata de un militante que, pese a que le merece todo su respeto, tiene sus derechos partidistas suspendidos.

Rechazó que Ruiz Rodríguez pueda convertirse en agente de discordia, enfatizó que merece todo su respeto, pero que el regidor por el PRI está imposibilitado de opinar, toda vez que aún no concluye el proceso por el cual se le destituyó como presidente del partido en el estado.

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