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En medio de gritos de inconformidad, rechiflas, manoteos y descalificaciones del grupo mayoritario de Morena a los diputados panistas, la 61 Legislatura local no pudo elegir a los integrantes de su Mesa Directiva en el Teatro de la República durante la primera sesión de Pleno, donde se instalaron.
La inconformidad de los morenistas se dio cuando el panista Antonio Zapata Guerrero, en su calidad de diputado decano, decretó un receso de la sesión. Esta decisión desató la inconformidad de los legisladores de Morena, quienes consideraban que la votación para la Mesa Directiva debía realizarse de inmediato tras instalarse.
Zapata Guerrero dijo que la sesión de Pleno para elegir a la Mesa Directiva se reiniciará hasta el 2 de octubre. Zapata defendió su decisión de decretar el receso, argumentando que estaba apegada a la ley y que su objetivo era buscar el diálogo entre las fuerzas políticas.
“Se decretó un receso para tener la oportunidad de dialogar, de llegar a acuerdos, de comunicarnos entre las fuerzas políticas, que están apegados a la ley. El artículo 62 de la Ley Orgánica me faculta para decretar el receso”, señaló Zapata.
El diputado decano añadió que el objetivo era “respetar la ley” y evitar distorsionar los hechos. “Hoy invito a los compañeros diputados a que no distorsionemos la nota. Ha sido muy claro: estamos buscando acuerdo, diálogo, que no se dio antes de la instalación”, explicó.
Edgar Inzunza, coordinador del grupo parlamentario de Morena, afirmó que no había justificación legal para el receso. “No hay argumento legal para este receso. Simplemente no tienen la mayoría legal y por eso no quieren votar hoy”, dijo Inzunza, quien también acusó al PAN de dilatar el proceso con la intención de evitar que Morena presida la Mesa Directiva.
Andrea Tovar Saavedra, la única diputada de Morena que logró la reelección, aseguró que el PAN tenía miedo de enfrentar a su bancada en la votación. “Tanto miedo le tienen a Morena que prefieren huir y esconderse que enfrentar. Si tuvieran los votos, se hubiera hecho la votación y no los tienen. No querían que nosotros presidiéramos la Mesa, no quieren soltar los nombramientos, no quieren soltar el poder”, afirmó Tovar.
El conflicto entre ambas fuerzas refleja las tensiones que marcarán la legislatura, con Morena aprovechado su mayoría para buscar control de posiciones en el Congreso, mientras que el PAN busca mantener influencia en el Legislativo.
Para Héctor Parra, analista legislativo y exdirector de Asuntos Legislativos del Congreso, la situación es tensa, pero no inusual en el ámbito parlamentario. Recordó que la Ley Orgánica del Congreso de Querétaro faculta al presidente a decretar recesos con causas que dificulten el curso de deliberaciones.
