La pandemia ocasionó que el presupuesto del INAH se redujera en 75%, de tal forma que esta institución debió organizarse para mantener su labor con una menor cantidad de recursos.

Rosa Estela Reyes García, directora por Querétaro del centro del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), dijo que el recorte se debió a la necesidad de redireccionar los recursos al combate del Covid-19.

El instituto se quedó sin dinero para realizar trabajo de campo, incluso sin la posibilidad de tener fondos adicionales, que obtenía con el ingreso de los dos museos: el regional, en la capital queretana, y el de sitio, ubicado en la zona arqueológica de El Cerrito, en el municipio de Corregidora.

Los investigadores cuentan con suficiente material acumulado para sistematizar, limpiar materiales, organizar hallazgos y entregar publicaciones para lo que resta del año, esto sin dejar de tener en cuenta que sí deben regresar al trabajo de campo, para lo cual requerirán recursos.

Son alrededor 3 millones de pesos los que se tenían destinados este año para proyectos de investigación y el presupuesto anual de trabajo, recursos que, en su totalidad, debió redireccionar el gobierno federal a Salud.

“Entendemos que por encima de nuestra importancia, que es la de la conservación del patrimonio, está la de la salud, y si el sector federal está destinando recursos adicionales para la habilitación de hospitales y la contratación de personal, pues bueno, ni modo de que nosotros podamos ser ciegos a la situación que aqueja al país”.

Aun asó, el INAH no se vio tan afectado, debido a que la Federación le garantizó el pago de la nómina, incluso para el personal que se encuentra por honorarios.

“Se nos reduce 75%; sin embargo, no se castiga en absolutamente nada la nómina de los trabajadores ni las prestaciones, y eso es un alivio porque, además de no tener dinero ni salarios, ya sería muchísima la presión. A nosotros nos garantiza, el sector federal, la nómina de los trabajadores y sus prestaciones”, refirió.

Gracias a ese recurso, precisó, etiquetado es que se mantienen en actividades los alrededor de 160 elementos que laboran en el INAH Querétaro.

“Garantizar la plantilla de personal, hasta la gente que se le llama capítulo 3 mil, porque son eventuales, ya fue un respiro, porque tenemos algunos trabajadores eventuales y contratos con empresas para el personal de limpieza y vigilancia, etcétera”.

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