La elección del nuevo Comité Ejecutivo del Sindicato Único de Personal Académico de la Universidad Autónoma de Querétaro (SUPAUAQ) se encuentra empantanada.
Por un lado, la Comisión Electoral del sindicato anunció el retiro de registro a las dos planillas que compitieron por el cargo y, por lo tanto, decretó la ausencia de un ganador reconocido por la Asamblea.
Por el otro, respaldado por una toma de nota obsequiada por la Junta de Conciliación y Arbitraje (JCA) de la Secretaría del Trabajo estatal, Saúl García Guerrero se asumió como nuevo secretario general y urgió a comenzar el proceso de entrega recepción.
Sin embargo, Rosalba Flores Ramos, secretaria general hasta el 14 de noviembre y quien con su planilla Unión Sindical Universitaria (USU) buscaba la reelección, afirmó que la toma de nota a sus contrarios es espuria y falta de validez; aseguró que la autoridad laboral violenta la vida sindical y la autonomía universitaria.
En rueda de prensa, ayer por la mañana, el catedrático Saúl García Guerrero afirmó que la Comisión de Vigilancia del SUPAUAQ (hasta ayer por la noche Comisión Electoral) está actuando indebidamente, al no proporcionar la lista de maestros que votaron el pasado jueves para elegir al Comité Ejecutivo.
Sin embargo, indicó que su planilla, Lucha Sindical Universitaria (LSU), presentó a la Junta de Conciliación y Arbitraje un padrón de votantes, con lo que suplieron ese documento retenido y, de esta manera, fue posible que la autoridad laboral les obsequiara la toma de nota el 31 de octubre.
Ante la expresión que hicieran las Comisiones de Vigilancia, Hacienda, así como la de Honor y Justicia del SUPAUAQ, sobre la ilegalidad en la obtención de toma de nota, el docente universitario apuntó que tiene en su poder un documento al que llamó “el acta de Asamblea” e insistió que fue firmada por el representante legal de la opción contraria, lo que —a su decir— anula las impugnaciones que pudieran darse y da validez al resultado que le otorgó el triunfo por una diferencia de cinco votos.
Por la tarde, al darse a conocer la resolución de la Comisión de Vigilancia sobre el retiro de registro de su planilla y, por lo tanto, la presunta invalidez de su triunfo, García Guerrero manifestó que no aceptará esta determinación y acusó a la Comisión de confundir a la Asamblea y de desconocer los procedimientos jurídicos del sindicato.
El docente, quien tiene una categoría de profesor de tiempo libre en la preparatoria Norte, insistió en que la toma de nota otorgada por la Junta de Conciliación es legal, ya que presentaron todos los documentos que se solicitó para este trámite.
La toma de nota es ilegal. La secretaria general del SUPAUAQ, Rosalba Flores Ramos manifestó que la toma de nota que la JCA otorgó a la planilla de García Guerrero es ilegal, “porque no presentaron la documentación necesaria que le de validez al acto”.
Gerardo Pérez Alvarado, representante legal de USU, apuntó que durante la jornada electoral ambas planillas acordaron llevar a cabo el cómputo de los votos, pero ninguno de los candidatos tomó protesta en la Asamblea ni se decretó un ganador.
Advirtió que la toma de nota que se le otorgó a LSU no es legal, puesto que entre los documentos que se tienen que presentar está el original del padrón electoral y el original del documento que consigna la votación, papeles que están resguardados por la Comisión de Vigilancia.
Ayer a las 8 de la mañana, la Comisión Electoral —ahora Comisión de Vigilancia—, que encabeza el maestro Guillermo Díaz Delgado, presentó una impugnación ante la Junta de Conciliación y Arbitraje protestando por la toma de nota obsequiada a Saúl García Guerrero y su planilla.
El vocero de la comisión, Jorge Luis Olmo Velázquez, afirmó en rueda de prensa posterior que lo que presentó la planilla Lucha Sindical Universitaria como un “acta de Asamblea” no es tal, sino únicamente un conteo; por lo que calificó de irregular la actuación de la JCA.
Asimismo, Olmo Velázquez manifestó que las autoridades laborales deben respetar el proceso y los plazos formales del sindicato y evitar realizar cualquier interferencia.
La Comisión de Vigilancia señaló que no existe, para el sindicato, ninguna planilla ganadora, por lo que el proceso que sigue es que el Comité Ejecutivo convoque a un Consejo Consultivo, formado por delegados sindicales de cada facultad, y que éste proponga un punto de actuación, que se llevará a la Asamblea para decidir si se repone la elección o se otorga el triunfo a algún candidato; pero no hay ningún plazo para ello.