¿No te gustaría que la sede del concierto fuera un lugar abierto? le preguntó Alexa a León poco después de ocupar sus lugares en el Auditorio Josefa Ortiz de Domínguez.
“Creo que aquí está bien, deja que escuches y sabrás porqué. Aunque han tocado en festivales en sitios abiertos, verás que se disfrutan mejor en lugares cerrados como éste”, respondió el joven que vio en su reloj que pasaban las 21:00 horas.
León había podido presenciar dos veces antes al cuarteto finlandés Apocalyptica en 2005 y 2008, aunque era su primer concierto en el coso de avenida Constituyentes; para Alexa era su primera vez ante los chelistas europeos quienes, a su vez, hacían su debut ante el público queretano en el primero de cuatro conciertos consecutivos programados en territorio mexicano. Su plática se interrumpió por el alarido colectivo al caer la penumbra.
Eicca Toppinen, Paavo Lötjönen, Perttu Kivilaakso y Mikko Sirén salieron al escenario para ofrecer una sinfonía de altos decibeles y vertiginosas escalas sobre las gruesas cuerdas de tres violonchelos aderezados con una amplia variedad de pedales de distorsión y los demoledores golpes sobre los bombos, tarolas y platillos de una Pearl color negro. En ocasiones salió al escenario el vocalista Franky Pérez que colaboró con los finlandeses en la grabación de la placa discográfica Shadowmaker, gira que llega a su fin en el país precisamente con estas presentaciones.
“Reing of fear”, corte incluido en el álbum más reciente, sacudió a todos de sus asientos. La conexión del cuarteto con las cuatro mil personas presentes en el foro fue inmediata.
Siguió “Burn” de su disco publicado en 2007, Words Collide, que provocó una estruendosa ovación inicial. Alexa jaló a León del brazo para decirle su primera impresión emocionada: "Están en otro nivel", le dijo entre el griterío.
Los músicos se entregan. Van de un lado a otro cargando sus chelos sin dejar de frotar el arco con sus cuerdas de forma vertiginosa. En el metal sinfónico, Apocalyptica ha consolidado un proyecto poderoso en poco más de 20 años. Instrumentos clásicos llevados al estruendo armónico y distorsionado, vibran por cada rincón del auditorio.
“Are you ready for fucking metal?”, preguntó Eicca Toppinen al centro del templete. Al unísono respondió la comunidad metalera queretana con una sonora afirmación.
“Grace”, “I'm not Jesus” con la participación de Franky para interpretar la parte que canta Corey Taylor (Slipknot-Stone Sour) en la versión original, además de “House of Chains” del disco Shadowmaker.
El chelista Perttu Kivilaakso tomó el micrófono para agradecer al público el recibimiento y para adelantar que México estará incluído en su siguiente gira con motivo de los 20 años de su primer disco Apocalyptica plays Metallica by Four Cellos, al tiempo que provoca suspiros en las metaleras presentes.
“Master of Puppets” se materializó entre la melodía del escenario y la voz de la multitud. Siguió otro cover, ahora de Sepultura con la estremecedora “Inquisition Symphony”. Headbanging a la queretana.
“Bittersweet”, “Till death do us part” y la canción homónima de la gira, “Shadowmaker” son parte del set que sacia con creces las expectativas de los metaleros queretanos que son un público entregado. Todos de pie, envueltos en la atmósfera finlandesa.
Las siguientes piezas en sonar son “Cold blood”, “Not strong enough” y “Nothing else matters” de Metallica que arrancan sonoras ovaciones. Apocalyptica ha ganado una plaza más para sus próximas giras.
Los europeos mantienen altos decibeles con “Riot lights”, “Refuse and resist” de Sepultura, así como “Seek and destroy” de Metallica coreada por todos los asistentes.
Alexa le enseña a León una mujer a unos metros de donde están. Es de la tercera edad pero está de pie y mueve su cabeza al ritmo de los chelos durante la interpretación de “Into the hall of the mountain king”, original del compositor noruego Edvard Grieg que enmarca un falso final del recital clásico-metalero.
La misma señora se une a la petición colectiva de “¡Otra, otra!” golpeando rápido sus pies con el suelo. Alexa y León voltean hacia otro lado y una niña disfruta con sus padres el concierto. Los queretanos aún quieren más y Apocalyptica vuelve al escenario para confirmar que en definitiva van a volver.
“One” de Metallica emociona, pero los finlandeses han colocado en el gusto del público temas propios como “I don't care” que todos entonan al saber que se acerca la despedida. “Dead man eyes” es la vigésimo primera y última canción del set. Sin duda, acepta Alexa, no hubo mejor lugar para ver a Apocalyptica por primera vez en Querétaro.