El ómbudsman Miguel Nava Alvarado expresó su confianza de que los diputados de Querétaro defiendan el procedimiento por el cual fue electo como presidente de la Defensoría de los Derechos Humanos (DDHQ), realizado en 2012, y de que eviten repetir la votación.
Aseguró que él fue electo presidente de la entonces Comisión Estatal de Derechos Humanos, hoy Defensoría, de manera legal y unánime. Asimismo, se autodeclaró perjudicado en este conflicto.
“Yo confío plenamente en las instituciones, creo en la Legislatura y en el Poder Judicial, creo en la libre determinación de nuestros diputados, que son quienes me eligieron. No me preocupa el tema, tengo confianza plenamente en las instituciones del estado, en las instituciones de Querétaro y las personas que lo representan”, aseguró en entrevista para EL UNIVERSAL Querétaro.
Elección impugnada
Hace dos años, el Congreso de Querétaro impidió a César Pérez Guzmán, trabajador de la entonces Comisión Estatal de Derechos Humanos, participar en las elecciones para la presidencia del organismo, bajo el argumento de que superaba la edad máxima establecida en la convocatoria, que es de 60 años.
El afectado acusó de discriminación a la Legislatura y acudió al Tribunal Superior de Justicia (TSJ) para promover un juicio constitucional, el cual, recientemente, le fue otorgado a su favor.
Por ello, la Legislatura podría repetir el procedimiento de elección para presidente de la Defensoría de Derechos Humanos, permitiendo la participación de Pérez Guzmán.
Sin embargo, el actual presidente de la Defensoría no comparte la resolución, por ello solicitó al Poder Legislativo defender el procedimiento por el cual lo eligieron.
“¿Qué va a pasar si la Legislatura no se defiende? Sería aceptar que violaron derechos humanos, que se equivocaron. Los diputados, obviamente, van a analizar el asunto y se respeta su resolución. Mi respeto a su decisión, la que sea. Claro que he hablado con ellos, de múltiples temas, no precisamente de éste, sino de otros referentes a las leyes. Estaré pendiente de lo que se logre consensuar a través de la Junta de Concertación Política”.
El pasado 2 de enero, Nava Alvarado presentó ante el colegiado del Tribunal Superior de Justicia un recurso de impugnación en contra de la resolución firmada por la magistrada Celia Maya García.
También dijo que César Guzmán no fue discriminado para competir como presidente de la Defensoría, simplemente la convocatoria estipulaba requisitos muy claros.
“Él se equivoca, pues los argumentos que utiliza para informar que se le violaron sus derechos humanos son jurídicamente improcedentes. El quejoso en el año 2009, cuando nace la Ley de Derechos Humanos en Querétaro, era empleado de esta institución y ya rebasaba los 60 años. Los requisitos para ser electo a cargos públicos son distintorios, no discriminatorios”, apuntó.
Ahora, la Legislatura dirime sobre quién ocupará el cargo como defensor de los derechos humanos en el estado, conflicto en el cual resultó como afectado el actual presidente de la Defensoría.
“No se puede proteger un derecho humano violando otro, u otros. No hay escenarios adversos, todos los escenarios son positivos. Una vez agotados los mecanismos legales, si la balanza se inclina de uno u otro lado se debe respetar la decisión de las autoridades”, concluyó.