Gallos Blancos continúa en tensa calma en cuanto al tema extra cancha, los jugadores siguen sin cobrar, pese a ello, Querétaro está oficialmente de vuelta en la pelea por la Liguilla, luego de imponerse por la mínima diferencia al Atlas la noche de ayer en el estadio La Corregidora, en partido válido para la jornada 15 del Clausura 2014.
Los pupilos de Ignacio Ambriz ligaron su cuarto partido sin conocer la derrota (y el tercer triunfo en ese lapso) gracias al solitario gol de Camilo da Silva al 76’, con lo que llegan a 20 unidades. La próxima semana visitarán al América y luego cerrarán la fase regular en casa ante Pachuca.
Cada vez que estas dos instituciones se enfrentan, el tema de la violencia en el graderío sale a relucir, pero esta vez la zona destinada a la porra visitante albergó solamente a 200 personas y todo transcurrió con calma.
La cifra oficial de asistentes a la Corregidora fue de poco más de 12 mil 300 personas.
Con el tridente brasileño del ataque de Querétaro otra vez completo, fue el cuadro local el que generó las primeras aproximaciones y aunque Atlas pudo voltear las cosas a su favor durante algunos minutos, el trámite inicial volvió durante el resto de la primera mitad.
A pesar de los cambios de ritmo de Camilo y William, así como un disparo desviado de media distancia de Ricardo Jesús, Gallos Blancos estuvo más cerca de abrir el marcador por conducto de Diego de la Torre al 40’.
El capitán de los emplumados robó la pelota a la última línea atlista en tres cuartos de cancha, y se enfiló al arco, pero ante la salida de Federico Vilar terminó por estrellarle la pelota a éste y dejando el grito de gol ahogado en la garganta de los aficionados.
El marcador no se movió durante los primeros 45 minutos, pero al momento del silbatazo que indicaba el medio tiempo, la sensación en el estadio era de que los locales estaban más cerca de romper el cero.
Los Zorros arrancaron la parte complementaria asediando la portería local, generando tres tiros de esquina consecutivos, que no sin complicaciones, fueron resueltos de manera efectiva por la defensa.
Luego, Gallos Blancos niveló el partido, que poco a poco se fue desarrollando menos en el medio campo, y con los dos equipos apostando a un juego más vertical, eran los emplumados los que más llegaban.
El 1-0 cayó en un tiro de esquina cobrado por Diego de la Torre desde la punta derecha; su pase fue preciso al encontrar la frente de Camilo da Silva, quien sacó un potente remate ante el que Vilar no alcanzó a reaccionar y entró por arriba y a la derecha de la portería al 75’.
En los minutos siguientes los rojinegros adelantaron filas y jugaron más en el tercer cuarto de la cancha, pero los locales no renunciaron al ataque y mantuvieron preocupada a la zaga tapatía, sin embargo, el marcador no se movió más.