Durante los últimos años, los divorcios en la entidad han incrementado considerablemente, alertó el Patronato Psicológico Queretano, al señalar que la principal causa de este fenómeno es la violencia familiar, la cual comienza con el maltrato psicológico y que afecta principalmente a las mujeres en edad adulta.
De acuerdo con la presidenta de la institución, Elidia Barbosa, no existen datos actuales sobre este tema, sin embargo, los últimos reportados, indican que en 2014 se llevaron a cabo en la entidad nueve mil 713 matrimonios, mientras que divorcios fueron mil 516.
“Los divorcios se generaron más durante septiembre y en octubre, siendo la principal causa la violencia intrafamiliar y el gasto que se tiene que dar para la manutención del menor”, acotó.
Agregaron que otras estadísticas, dadas a conocer por encuestas realizadas por la Secretaría de Salud en 2010 indican que la violencia intrafamiliar en el estado de Querétaro se ubica en el tercer lugar a nivel nacional con esta problemática.
“Es parte de las causales de divorcio, esta violencia intrafamiliar, y que ha aumentado considerablemente en dos años más de 28%, entre 2011 y 2012, y es alarmante porque no se detiene, ya que se generan ciclos tóxicos”, aseguro.
Comentó sobre la nueva legislación que se ha implementado en esta materia, en donde la violencia es causal de divorcio.
Integrantes psicológicos de esta institución aseguraron que el principal agresor son los hombres en edad adulta, y como principal víctima las mujeres o su pareja, de igual forma en edad adulta, situación que no se diferencia en la niñez, niños y niñas son agredidos por igual.
“Los niños cuando son pequeñitos, el índice de violencia que reciben no se diferencia entre niños y niñas, va muy parejo, pero a medida que van subiendo sus edades, quienes se ven más afectadas por la violencia intrafamiliar son las mujeres, quienes se encargan de cuidar a los hijos en los hogares, aun cuando las familias se separan los niños se quedan a cargo de la madre”, aseguró Yolanda Beltrán, psicóloga.
Sin embargo, destacaron que si la mujer agredida, en este caso, la madre, no recibe atención psicológica, se transforman de víctima a victimaria, en contra de sus propios hijos, con agresiones, que en edad adulta el niño vuelve a replicar.
“Muchos de los casos que se reportan es porque la violencia se ha venido padeciendo desde hace varios años, cuando están vulnerando la parte de la integridad de la familia, cuando son muchas veces cuando las han golpeado físicamente o una agresión sexual importante, se llega a una denuncia, pero en muchas de las veces, las gente no sabe que está siendo violentada”, acotaron.
Por ello, destacaron la importancia de que los menores reciban atención psicológica durante el periodo de divorcio de sus padres, ya que de no atenderse, se genera un cambio de conducta en los pequeños, que puede derivar en agresiones.