El obispo de Querétaro, Faustino Armendáriz Jiménez, exhortó a los fieles católicos a vivir esta cuaresma (que dio inicio el día de ayer con el miércoles de ceniza), como un tiempo de esperanza ante la violencia que se está viviendo en el país.
De igual forma, calificó este periodo como un tiempo de conversión, a dejar de ser indiferentes ante la necesidad del prójimo, así como tomar este periodo para a acercarse a Dios.
Agregó que de manera histórica, la temporada de Cuaresma es una convocatoria para que las personas se acerquen a la Iglesia y tener un encuentro con Dios, y junto con él, buscar el camino adecuado.
“Todos somos conscientes de nuestra lejanía de Dios a través del pecado, y la Cuaresma aparece en la sociedad y en la Iglesia como un escenario de esperanza y nos hace propuestas muy concretas, entre estas, a acudir a misa los domingos e intensificar esa relación con Dios”, aseveró.
En este sentido, invitó a los files a realizar más minutos de oración, sacrificar algo por las necesidades de los demás, principalmente con ayuda humanitaria hacia quienes tienen algún tipo de carencia.
“Hay que salir a la calle y realmente ayudar a alguien que lo necesita, yo creo que esta obra en la cual nuestra fe se tiene que convertir, es la invitación principal del papa, también es su mensaje, traducir nuestra fe en obras y esto nos toca a todos, a todo aquel que dice ser cristiano católico, a todo aquel que es creyente, a todo aquel que tiene la responsabilidad de entrar a este itinerario cuaresmal”, expuso.
Al respecto, el vocero de la Diócesis, Saúl Ragoitia, afirmó que en el miércoles de ceniza, se tuvo una participación de 80% de católicos en las Iglesias del estado, esto tomando en consideración que en Querétaro 92% de la población profesa esta religión.
“Practicantes tenemos entre 11 a 17%, por ello la Cuaresma es el tiempo de salir al encuentro, marcado por este acontecer social, esto aunado a que en todo el mundo se celebra el miércoles de ceniza y el inicio de la Cuaresma, tiempo para dejarnos servir por Cristo, una oportunidad en esta ocasión en donde se nos invita a no ser indiferentes frente al que sufre y vive situaciones difíciles”, reiteró.
Añadió que el tomar ceniza, representa un compromiso, es decir, a vivir la conversión y salir al encuentro del hermano, sobre todo del más necesitado y dejar a un lado las practicas que generen violencia.
Fieles Serranos
Por otro lado, en la Sierra Gorda queretana, cientos de fieles acudieron también a recibir ceniza en sus respectivas parroquias. Desde las seis de la mañana hasta las ocho de la noche, la población desfiló y esperó paciente su turno.
Ante los presentes en la parroquia de Santiago Apóstol, Fidencio Servín, dijo que se comienza con una etapa importante en la vida de los católicos, “con la imposición de la ceniza sobre nuestra cabeza, iniciamos un tiempo de reflexión personal, de efectuar examen de conciencia, de cómo estamos frente a Dios, y sobre todo de no olvidarnos de las personas que más nos necesitan”.
Por último destacó que en la oración está la permanencia del cristiano, “estamos iniciando los tiempos de cuaresma, tenemos que volver nuestros corazones a Jesús, que no venga la calamidad sobre nosotros, el tendrá misericordia y compasión, el nos acompaña siempre, y es muy importante hacer penitencia por los hijos de la Iglesia, él sabe cómo encausar nuestra oración, hoy hagamos juntos este importante compromiso”.