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Reyes Santana Morales fue el primer diseñador de billetes en el país. Trabajó durante 25 años para el Banco de México y estuvo a cargo de diseñar 12 billetes mexicanos, desde el de 5 pesos, hasta el de 50 mil, de 1963 a 1987. También realizó el diseñó de papel moneda para otros países como Argentina, Ecuador, Turquía, entre otros.
El talento de Reyes Santana revolucionó la forma de operar en el Banco de México, pues a partir de él, los billetes comenzaron a diseñarse en el país y no en el extranjero; aunque no siempre fue así.
En la década de los 60, Reyes Santana trabajaba para la Secretaría de Hacienda, supervisaba en Italia una nueva línea de bonos que serían usados en la tesorería y que eran diseñados en el extranjero. En aquellos años diseñó su primer billete, el de 20 pesos, que mostraba imágenes y simbolismos de la cultura mixteca, todo el diseño en tonalidades verdes.
Cuando el mundo conoció los finos trazos y el diseño tan elaborado de Reyes Santana, le llovieron las ofertas de trabajo en varios países, pero entre todas las propuestas llegó también la del Banco de México, y ahí comenzó su trayectoria como diseñador de efectivo ya sea en papel o en moneda.
“Con este billete de 20 pesos, en donde mostré a la cultura mixteca en toda su esencia, su arquitectura, cerámica, todo. Con ese trabajo la fábrica de papel moneda se enganchó para tener la maquinaria y hacerlos aquí en el país, una comisión del Banco de México vio mi trabajo, me iban a contratar en Italia, ya habían visto mi habilidad, tenía yo 26 años y entonces el Banco de México me dijo ‘Tú eres mexicano, vente como nosotros, acá tenemos a la virgencita de Guadalupe, el chile verde’ y pues me convencieron”, cuenta Reyes entre risas.
Reyes Santana tuvo el honor de plasmar su firma en varios billetes que estuvieron en circulación, en todos los que él diseñó aparece su nombre o sus iniciales con letras diminutas. Dice orgulloso que su técnica favorita al momento de crear los diseños era la acuarela, pues no existían las técnicas de impresión ni la tecnología con la que se cuenta hoy en día.
El maestro Santana únicamente le indicaban cuál era el personaje que debía aparecer en el billete, y el diseñador se encargaba de todo lo demás. Recuerda los largos meses de investigación sobre los próceres y lugares históricos del país, hasta seleccionar el que se colocaría sobre el papel.
El billete de 5 pesos
Al ser tan perfeccionista, Reyes no se sentía complacido si no afinaba todos y cada uno de los detalles del diseño. Recuerda que particularmente el billete de cinco pesos, que mostraba la imagen de Josefa Ortíz de Domínguez, la corregidora de Querétaro, fue uno de los diseños que más trabajo le costó, pues no encontraba una imagen de la corregidora que fuera completamente de su agrado.
“Me dijeron que el billete tenía que tener la imagen de Josefa, empecé a investigar pero encontré decenas de imágenes de la corregidora, y todas muy distintas entre si, fue un problema para mí decidirme por una. Finalmente me decidí por fotografiar una estatua que está en la Ciudad de México y después le suavicé las facciones, hasta lograr la expresión facial que necesitaba para realizar el diseño”
Mientras el talento de Reyes Santana se reflejaba en decenas de billetes y monedas de circulación nacional, sus capacidades aún estaban a prueba en otros países.
La trayectoria internacional
En aquel momento, cuenta Reyes Santana, la Casa de Moneda Argentina requería del trabajo de un diseñador para crear la imagen de los billetes de medio millón y de un millón de pesos; los argentinos esperaban algún talento europeo, como era la costumbre, y sorprendidos por la llegada de un mexicano, varios de ellos dejaron ver su molestia. Santana, no prestó oídos a los comentarios negativos y se dedicó no sólo a diseñar los billetes, sino a capacitar a los trabajadores argentinos.
Cuando el diseño de los billetes estuvo listo, los argentinos no tuvieron más remedio que reconocer las extraordinarias habilidades del diseñador mexicano.
“El director de la Casa de Moneda le dijo a los demás, por haber mostrado este gesto (de desprecio) hacia Santana, él no va a comer en la cantina de aquí de nosotros, de dos en dos los van a invitar a comer a donde él quiera. Y entonces comí lo mejor de lo mejor. Restaurantes carísimos, casi todos estaban vacíos, porque no todos tenían el nivel económico para poder comer ahí”.
El Banco de México
Veinticinco años después de que Reyes Santana comenzara a trabajar en el Banco de México, la relación laboral terminó. Al diseñador mexicano le ofrecieron trabajo en Suiza, una oferta que no pudo rechazar, por lo que renunció a su trabajo como diseñador en México. Sin embargo, la oferta laboral en Suiza no pudo concretarse.
Reyes Santana no lamenta ninguna de las decisiones que ha tomado, “la audacia es el juego”, dice. Después del Banco de México el diseñador de billetes se mudó a Querétaro, donde fue maestro de diseño gráfico en la Universidad del Valle de México.
Santana Morales es un eterno enamorado de su país, vive con la mexicanidad a flor de piel después de una trayectoria de más de 25 años.
Se dice orgulloso de todos y cada uno de sus diseños, en los que siempre imperó por encima de todas las cosas, la simbología mexicana.
“A mí siempre me ha encantado lo mexicano, no somos malos, somos de lo mejor, mi mayor satisfacción ha sido reinventar todo esto y dejarlo impreso en mis diseños”, comenta.
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