La redistritación en el estado de Querétaro que está siendo llevada a cabo por el Instituto Electoral de Querétaro y analizada por cada uno de los partidos políticos dará certeza a las elecciones que se lleven a cabo en 2015, aseguró el dirigente del PRI en la entidad, Alonso Landeros.
El priísta aseveró que era necesaria una acción de esta magnitud en el ámbito electoral para Querétaro, aunque esto no significara la pérdida o suma de votantes.
La necesidad de que se origine una redistritación en Querétaro a nivel local, de acuerdo con el dirigente, es por el gran crecimiento demográfico que tiene año con año la entidad, y era necesario un reajuste en materia electoral tanto en el ámbito geográfico como en el político.
“Estamos analizando si esta redistritación se dio en los mejores términos. Ya nos instalaron este sistema para revisarlo y tener una posición muy clara de cómo vemos la redistritación desde el punto de vista del análisis que ha hecho el partido”, dijo.
Las modificaciones que conforman esta redistritación presentada por el IEQ a los partidos políticos, a decir de Alonso Landeros, es que la delegación de Santa Rosa Jáuregui se queda en un solo distrito, Pedro Escobedo comparte distrito con Colón y no, como lo venía haciendo, con Tequisquiapan, municipio que ahora compartirá distrito con Ezequiel Montes; San Joaquín se une a Cadereyta y Tolimán, mientras que Peñamiller se une a los municipios de la sierra.
“Esencialmente ese es el proyecto de redistritación, con algunos ajustes, por supuesto, aquí en la zona metropolitana, pero en esencia es eso, y nosotros coincidimos en que en Querétaro exista una redistritación, finalmente hemos crecido en población, se ha ajustado la zona metropolitana , creo que era necesario. De entrada, coincidimos con el ejercicio de redistritación”, afirmó.
Los partidos políticos, incluido el PRI, tienen 15 días a partir de la recepción del proyecto (que les fue otorgado la semana pasada) para manifestar lo que crean pertinentes, lo cual en el caso del tricolor ya se trabaja con abogados.
“Estamos analizando si la redistritación va a quedar así o podemos hacer alguna sugerencia. Esto da certeza y, sobre todo, le da al partido certeza porque sabemos que el proyecto de redistritación obedece a cuestiones técnicas y demográficas con una fórmula matemática, no tiene sesgos políticos. Espero que así sea y estamos apostándole a la buena fe”, comentó.
No se pierden votantes
En relación a si se contempla la posibilidad de perder votantes con este proyecto, el líder priísta en al entidad aseguró que no existe tal riesgo, ya que dentro de la historia electoral, principalmente en las últimas tres elecciones, en Querétaro ningún partido tiene predominancia electoral en ningún distrito.