La incorporación de nuevas tecnologías como el uso de iPod, enfermedades, golpes y el exceso de ruido están provocando un incremento en las consultas médicas por pérdida auditiva, alertó el otorrinolaringólogo Juan Manuel Jácome Gordoa, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) delegación Querétaro.
Detalló que a diario en la institución se ofrecen entre 15 a 20 consultas relacionadas con el oído, y que cuando se presenta el daño generalmente es irreversible.
Por cada mil personas que se atienden en el IMSS, de cinco a seis sufren de algún grado de sordera. Y esta condición se puede tratar a tiempo si se identifican los factores de riesgo y los primeros síntomas que indican un problema de audición, como: acercarse más a una persona o preguntar varias veces para escuchar bien lo que se dice.
En Querétaro, pese a que la Comisión de Participación Ciudadana de la 56 Legislatura local aprobó la iniciativa de ley de respeto vecinal, la cual preveía disminuir problemas entre vecinos de colonias, conjuntos habitacionales por ruido o falta de higiene en los exteriores, ésta nunca llegó al pleno del Congreso, por lo que a la fecha no aplica.
Ante esta situación el presidente de la Comisión de la Participación Ciudadana de la 57 Legislatura, Diego Foyo, aseguró que habrá de retomarse el tema. “La ley de respeto vecinal que se empezó a trabajar en la Legislatura anterior es uno de los temas que habremos de retomar, concretamente en la Comisión de Participación Ciudadana se quedó pendiente y lo tenemos en la agenda para retomarla; regular la sana convivencia entre los vecinos de la ciudad en cuestión de ruido, de decibeles, del respeto en los lugares condominales en donde la gente vive muy próxima una a otra”, dijo.
Sin embargo, para el presidente de la Comisión de la Salud del Congreso local, Enrique Correa, el tema de la contaminación por ruido ya está regulado por la norma 018 de la federación, que indica los decibeles permitidos para convivencia entre vecinos y el órgano encargado de hacer que se cumpla es el municipio.
Lo que se hace actualmente, dijo, es apoyarlos para que cuenten con los elementos necesarios para hacer su trabajo, esto ante el crecimiento del estado.
“Son los ayuntamientos que tienen la obligación hacer los chequeos, multar, clausurar o remitir al Juzgado Cívico municipal a quien genere contaminación auditiva, lo que estaremos haciendo en esta Legislatura es reforzar a las administraciones municipales para que cuenten con los inspectores necesarios y los aparatos suficientes para la medición de las ondas decibeles del ruido”, dijo.
El padecimiento
La sordera es una disminución en la capacidad auditiva que puede ser parcial o total. En términos médicos es hipoacusia o anacusia, según el nivel que presente el paciente.
“Los casos de hipoacusia son muy variables. El ruido es una causa frecuente de pérdida de audición, pero no es la única y eso va a depender de la intensidad y el tiempo de exposición”, mencionó Jácome Gordoa.
El número de personas con problemas auditivos va en función al crecimiento poblacional y al aumento del ruido que se genera en las ciudades; pero lo que más influye es el uso de aparatos auditivos que de manera directa se conectan al oído y que utilizándolos de forma permanente y a volúmenes altos, a la larga, van a dejar secuelas en quienes los utilizan, indicó el especialista.
Por pérdida auditiva debido al exceso de ruido se trata un caso al día; se presenta generalmente en trabajadores de la industria de la construcción, albañiles que utilizan cinceles, aplanadoras o de la industria metalmecánica, que en muchas ocasiones no tienen precaución.
“Por exposición laboral, personas que trabajan en un ambiente ruidoso y que no se cuidan pueden llegar a tener sordera o hipoacusia que va progresando, eso depende de cuánto tiempo y a que nivel de ruido se expongan, sólo es cuestión de tiempo”, manifestó el galeno.
De acuerdo con el delegado en Querétaro de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STyPS), de un padrón de 7 mil 500 empresas en el estado, entre 70 a 90 están reportadas con niveles altos de decibeles.
“Hacemos revisiones constantes a las condiciones de seguridad y salud que deben operar en las empresas para que estén al pendiente que se utilicen los dispositivos adecuados, sin embargo, hemos detectado que algunos no están cumpliendo con su función y en otros son los propios trabajadores los que no aceptan colocarse los mecanismos de seguridad”, manifestó el funcionario.
Indicó que la denuncia del trabajador también es muy importante. En lo que va del año se ha reportado a 10 empresas por altos decibeles y es en donde la dependencia interviene de manera conjunta con las comisiones de Seguridad y Salud.
La STyPS en este año ha aplicado 243 sanciones por un monto de 19 millones de pesos, en las que destacan como las industrias más ruidosas las del sector electromecánico, que son las que más se verifican.
Jácome Gordoa refirió que el oído no está diseñado para estar expuesto a ruido intenso. La contaminación acústica, dijo, se empieza a medir a partir de los 40 o 60 decibeles similar al que se da en una discoteca o un lugar muy concurrido.
Alertó que con el uso de iPod, en cuestión de tiempo habrá más pacientes con ese problema y los daños se van a empezar a ver en esta generación que está abusando de eso, cuando envejezca, se van a presentar los problemas, apuntó.
Jácome Gordoa dijo que si se llega a los 4 mil hertz, esta es la primera frecuencia que lesiona al oído y comienza el trauma acústico, para de ahí avanzar hasta la pérdida total.