En la capital de Querétaro comienza a percibirse aumento en el precio de productos avícolas; el costo del kilogramo de pollo creció 24%, en tanto el del huevo subió 10%.
Hace unas semanas, en promedio el kilo de huevo costaba 27 pesos; a la fecha cuesta 30. En cuanto al pollo, escaló en promedio de 38 pesos a 50 pesos.
EL UNIVERSAL Querétaro realizó un recorrido por comercios de huevo y pollo, a través del cual constató el incremento en dichos precios. Además amas de casa aseguraron percibir la afectación a su economía.
Un comerciante justificó que debido al brote de influenza aviar en Guanajuato se generó escasez entre los productores avícolas, lo que trajo el aumento al precio de los productos.
Pese a que autoridades como la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) enfatizaron que el brote de influencia aviar no es motivo para aumentar el precio de los productos, algunos comerciantes han aumentado el costo.
En el mercado Josefa Ortiz de Domínguez La Cruz, el precio de kilo de pollo es de 50 pesos, mientras que el del huevo se establece en 30 pesos.
Las amas de casa aseguran que han cambiado su dieta alimenticia, pues coincidieron en sustituir los derivados avícolas por verduras, las cuales tienen un precio más accesible.
Elvira es una de las consumidoras que ha percibido el aumento en el precio: “El huevo aumentó dos pesos. Esto afecta a la economía, pero aun así tenemos que comer. Hay veces que sí lo consumo, hay veces que no. Si sube mucho mejor dejo de compararlo y opto por la verduras y a veces aunque sea compro medio kilo”.
Chile poblano, papa, brócoli y demás verduras son las que compra Araceli, otra ama de casa que también reemplaza el huevo.
Respecto al blanquillo, Lucía —consumidora— aseguró que “en algunas partes ha subido algo pero en otros siguen respetando el precio, ha subido como tres o cuatro pesos”.
También afirmó que “estos precios nos afectan; pues son muchos los gastos que uno tiene y pues si todavía los aumentan pues nos afecta mucho”. Lucía suele suplir al huevo y al pollo por las calabazas.
En general, las consumidoras afirmaron restringirse de comparar huevo o pollo, debido al aumento que se ha originado.
Teresa Luna mostró inconformidad ante tal situación: “Ha subido, por eso uno tiene que medirse tantito con las compras. El gasto disponible es el mismo y las cosas suben. Teresa enfatizó que “una tiene que amarrarse la tripa; en vez de hacer dos huevos sólo hago uno y los rindo con verdurita”.
Al 26 de febrero, la Profeco ha interpuesto procesos administrativos a 600 establecimientos de todo el país, por especular o elevar los precios de huevo y pollo. Entre las sanciones se contempla la clausura de los negocios.
El procurador federal, Humberto Benítez Treviño, informó que “no hay desabasto de huevo y pollo, y por tanto, no hay razón alguna para encarecer ambos comestibles, básicos en la dieta de los mexicanos”.
Además el funcionario reiteró que “intensificaremos los operativos; habrá mano firme para quien dañe la economía familiar”.
A la fecha, la Profeco ya ha realizado mil 300 monitoreos y mil 155 visitas de verificación a establecimientos comerciales, de los que derivaron procesos administrativos a 600 de ellos y en algunos casos se colocaron sellos de advertencia.