Con un mercado que crece a un ritmo de 40% al año, ampliar la forma de venta constituye una forma segura de aumentar las ganancias; es el caso de las ventas por internet.
En la actualidad, no solo las grandes firmas usan esta herramienta para ofrecer sus catálogos, también los micro y pequeños negocios se han sumado a la facilidad que existe de abrir una página de Facebook.
Es el caso de Motozona, que en esencia es un taller mecánico que opera desde hace tres años; Benjamín, el dueño del negocio, comenzó a surtir su taller con otras mercancías, desde refacciones hasta cascos y uniformes de seguridad.
“En 2013 abrí un taller, por la falta de trabajo resultó una manera de invertir y ofrecer el servicio que yo sé hacer […] la publicidad que usábamos era con algunos volantes o invitando al amigo del amigo y los clientes que tenemos son de la zona en la que trabajamos”.
El taller Motozona se ubica en La Pradera, municipio de El Marqués, una zona que de 10 a la fecha ha crecido poblacionalmente; apenas en 2016 abrió la página de Facebook de su negocio y, con fotografías tomadas con un teléfono celular, comenzó la venta por medio de la web, que le ha permitido aumentar en 30% sus ventas.
“Yo tengo un grupo de motociclistas, a veces nuestra manera de surtirnos de cosas era con otros talleres, con otros compañeros que nos platicaban de cómo les había ayudado eso de vender por internet”.
“Al principio éramos un taller pero luego comenzamos a vender refacciones y artículos para motos, como casos, chamarras, guantes y así de esas cosas, entonces mi hija me ayudó a abrir la página de Face, empezamos a subir las fotos de la mercancía y entonces nos empiezan a recomendar”.
De momento el espectro de venta es en el mismo estado de Querétaro, sin embargo, hay experiencias como Biker Shop, cuya tienda física está en la colonia Comerciantes de la capital, en donde se surte a toda la República Mexicana.
“Conocemos varios casos y ellos nos han ayudado a más o menos cómo le tenemos qué hacer, lo que sí te digo es que las ventas han aumentado, poquito porque somos todavía una tienda pequeña, pero nos hemos apoyado con otras experiencias, hay algunos que ya hasta tienen convenios con paqueterías y el envío es más barato”.
Igual que con las compras, las ventas por internet tienen margen de riesgo, en donde se busca que el producto sea entregado antes de pagarlo.
“Como todo hay gente listilla, solo una vez un vato que quería que le mandara una pieza para su moto, costaba mil pesos, pero según le urgía porque no tenía cómo moverse para depositar, quería que le mandara el producto pero a mí no me daba garantía de nada y mejor ya ni le hicimos caso, luego en otros páginas los denunciaron porque hubo quien sí le hizo envíos”.
La experiencia de los micro y pequeños negocios es diferente, porque reconoce Benjamín que es una forma de publicidad gratuita y con un mayor espectro de impacto.
Los grandes corporativos han aprovechado internet y ofrecen sus productos en línea, como el caso de supermercados; a nivel de negocios personales o familiares, Facebook se ha convertido en la herramienta perfecta para “las tiendas virtuales”.
En México, en 2014 nació la Asociación Mexicana de Ventas Online (AMVO) para capacitar a los interesados en explorar el negocio, además de generar estadísticas (aunque restringidas) del mercado en internet.
Actualmente está constituida con 90 integrantes y los estudios que ha generado, sobre el mercado de las ventas online, no pueden consultarse a menos que se pague una membresía.
Al ser un mercado endeble en su regulación y control, hay apenas estimaciones de la Secretaría de Economía que indica que durante 2015 las ventas por internet representaron ganancias por 4 mil millones de dólares.
Mientras que la revista Forbes, expone que las ventas online crecen a un ritmo de 40% al año, mientras que el potencial de venta es de 160 mil millones de pesos o bien 8 mil millones de dólares, es decir, que apenas explota 50% de su mercado.