Entre porras y aplausos fueron despedidos los restos del director de la Policía Municipal de Apaseo el Grande, Guanajuato, Jesús Salgado Martínez, quien fue abatido afuera de su domicilio la mañana del pasado jueves.
Un grupo de 20 uniformados, aproximadamente, se apostaron afuera de la funeraria La Amistad, donde velaron a Jesús Salgado Martínez.
Cerca del mediodía, el presidente municipal, Gonzalo González Centeno, llegó acompañado de su gabinete a las instalaciones de la funeraria. Minutos después se escuchan aplausos y porras para despedir al ex jefe policiaco. El féretro fue conducido a una patrulla de la corporación que llevó el cuerpo por las calles de Apaseo hasta la presidencia municipal.
Integrantes del pentatlón militarizado encabezaron el cortejo fúnebre y además entonaron el “toque de silencio”, mientras que una escolta de uniformados caminó junto al vehículo que transportaba al féretro.
Una primera escala se hizo en la dirección de Seguridad Pública en cuyo patio se mencionó tres veces el nombre de Jesús Salgado Martínez a lo que los elementos contestaron al unísono: “¡Presente!”, para después continuar el cortejo hasta el patio principal de la presidencia municipal.
Cuando el cuerpo arribó a la sede de la alcaldía, las autoridades municipales hicieron la guardia de honor mientras que la escolta policiaca acompañó al ataúd.
El edil Gonzalo González elogió a Chucho como un gran elemento y valioso amigo, que siempre tuvo una vocación de servir a la comunidad.
El alcalde terminó su discurso con la voz entrecortada: “Me duele mucho lo que te hicieron... adiós, amigo Chucho”, e inmediatamente se dio el pase de lista para el ex jefe policiaco. Después se replegó la bandera que cubría el féretro del fallecido para dárselo a su viuda e hijos, seguido de los aplausos de los asistentes.
Afuera del recinto se detonaron disparos de salvas en memoria de Jesús Salgado. Después, el cortejo inició la marcha hacia la parroquia de San Juan Bautista donde se efectuó la misa del cuerpo presente. Finalmente sus restos fueron cremados y depositados en una cripta.
El jefe de la policía fue abatido el pasado jueves en domicilio, en la colonia Las Huertas de la cabecera municipal de Apaseo el Grande, cuando se dirigía a sus actividades.
