Durante 2018 Querétaro se colocó como la sexta entidad que menor afectación económica porcentual registró en relación a su Producto Interno Bruto (PIB) por hechos relacionados con la violencia, revelan datos de la sexta edición del Índice de Paz México 2019 (IPM) que publicó este martes el Instituto para la Economía y la Paz (IEP).
En México, el impacto económico de la violencia se elevó 10% en 2018, alcanzando 268 mil millones de dólares (5.16 billones de pesos), lo que equivale a 24% del PIB del país.
En el estado de Querétaro, el costo de la violencia ascendió a 64 mil 539.7 millones de pesos, que equivale a 9.9% del PIB.
Los estados que menor impacto económico proporcional registraron frente al PIB por hechos de violencia fueron: Campeche (2.2%), Ciudad de México (6.9%), Coahuila (7.3%), Yucatán (7.6%), Nuevo León (8.8%) y Querétaro (9.9%).
Mientras que los estados que mayor impacto económico proporcional registraron frente al PIB por hechos de violencia fueron: Guerrero (76.5%), Durango (48.0%), Morelos (41.0%) y Guanajuato (36.6%).
El impacto económico de la violencia en todo el país en 2018 fue de 41 mil 181 pesos por persona, mientras que en Querétaro fue de 29 mil 363.7 pesos, equiparable a 9.9% del PIB estatal.
Estas pérdidas per cápita, a nivel nacional, equivalen a más de cinco meses de ingresos de un trabajador mexicano promedio.
En el país el impacto económico de la violencia fue 10 veces mayor que el gasto público en salud y ocho veces mayor que en el rubro de educación.
El impacto económico global de la violencia se define como el gasto y la actividad económica relacionados con “la contención, la prevención y la atención de las consecuencias de la violencia”.
Las estimaciones incluyen los costos directos e indirectos de la violencia, así como un multiplicador económico.
Los costos directos son los costos del delito o la violencia para la víctima, el perpetrador y el gobierno. Dichos costos incluyen gastos como el costo de las fuerzas policiales, gastos médicos, funerarios o de encarcelamiento.
Los costos indirectos son los costos que se acumulan después del delito. Incluyen el trauma físico y sicológico, y el valor presente de los costos futuros relacionados con el incidente violento.
Este estudio del IEP incluye también una medida del impacto del miedo en la economía, puesto que las personas que temen ser víctimas de delitos con violencia muestran alteraciones en su conducta.