Juan Luis Ferrusca Ortiz, titular de la Secretaría de Seguridad Pública del municipio de Querétaro, informó que la meta es que, para antes de que concluya su administración, el 100% de los policías que tienen contacto directo con la gente cuenten con una cámara corporal, mejor conocida como body cam.
Actualmente son 134 elementos de la corporación los que ya cuentan con ese respaldo tecnológico, y la adquisición de más aparatos ya se tiene programada.
La meta será lograr que por lo menos 700 elementos más de la corporación cuenten con una cámara, cifra que corresponde a los policías que realizan funciones operativas en calle.
Se trata de aparatos que ayudarán a dar certeza tanto a la corporación como a la ciudadanía respecto al trabajo realizado, llegan a servir para comprobar que el trabajo que realizaron los elementos de la corporación fue apegado a los lineamientos, también como evidencia, en caso de que no ocurra así y, por tanto, se tomen acciones por las autoridades competentes.
“Siempre que tengamos nosotros evidencia que nos solicite la autoridad, tenemos la obligación de hacerla llegar, el objeto es, finalmente, generar una investigación adecuada, apegada a derecho y con esto nosotros podemos acreditar el actuar de nuestro personal policial”, declaró.
El funcionario municipal subrayó que ha llegado a presentarse la grabación de esos elementos tecnológicos en aquellos casos en los que una autoridad ha pedido la evidencia del actuar policiaco, especialmente cuando existe una contradicción entre lo reportado por el oficial con lo que la persona con la cual tuvo contacto afirma que ocurrió.
“No traigo la información de en cuántos casos usamos estas tecnologías, pero se usan, incluso, las de las videocámaras en la detención de probables responsables. Las tecnologías tienen que estar utilizándose. Toda interacción de la actividad policial, en donde haya disponible una tecnología y que nos lo requiera la autoridad, la hacemos llegar, en todos los casos”, argumentó.
La body cam resulta una herramienta que da seguridad, puesto que protege, como evidencia, tanto al elemento policiaco como a la persona con quien tuvo una interacción.
Y es un respaldo que brinda certeza y transparencia respecto al actuar de los elementos de la corporación, también da tranquilidad a la propia ciudadanía de que podrá exigir que ese registro se presente como evidencia, cuando así se requiera.