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Debido al comportamiento de la incidencia delictiva es necesario considerar un giro de timón en la estrategia local de seguridad, consideró el coordinador del Laboratorio Universitario de Seguridad Ciudadana (LUSC), de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Autónoma de Querétaro (UAQ), Guillermo San Román.
El especialista agregó que la política implementada no ha dado resultados, por lo que es necesario invertir en el desarrollo de una policía de proximidad, en vez de esquemas relacionados con la persecución.
“Claramente hace falta un giro de timón porque la estrategia implementada no ha tenido absolutamente ningún efecto, después de esta inversión de 4 mil millones de pesos que se iban a ir sobre todo a la Comisión del Sistema Penitenciario, al Tribunal Superior [de Justicia] y a la fiscalía, pero no a las fiscalías, pues hemos visto un aumento importante de los delitos en Querétaro”, indicó.
San Román refirió que tan solo el último trimestre del año pasado fue uno de los más violentos, sin que se muestre un freno. Por ello, planteó la necesidad de que en el estado se privilegie una política pública de prevención, en vez de una política de persecución que, dijo, pareciera ser contraproducente.
“Es decir, el último trimestre del año pasado fue el más violento; con más delitos en la historia de Querétaro.
Tenemos una tasa de crecimiento a la que no se le está poniendo ningún freno. Entonces la estrategia de videovigilancia o invertir más en la persecución que en la prevención claramente nos está dejando peor. Creo que lo que hace falta es invertir más en personal y menos en tecnología”, dijo.
El coordinador del LUSC externó que lo que detiene a los delitos son el personal de seguridad que está en calle, no los sistemas de videocámaras, de ahí el planteamiento de incentivar a la policía de proximidad.
En este punto, resaltó la importancia de que los elementos policiales tengan cercanía con los ciudadanos y conocer los entornos de las localidades para estar atentos a cualquier cambio en materia de seguridad.
“Y sobre todo el tipo de conducta que ellos realizan. Necesitamos policías de proximidad resolviendo problemas con proximidad todos los días y no montados en su camioneta, encapuchados y con armas largas; los necesitamos conviviendo con el ciudadano”, comentó.
Al respecto, añadió que también se debe tomar en cuenta la política social para atender esta problemática, debido a que hay factores del entorno social que podrían estar teniendo incidencia en los delitos.
En relación con los factores que influyen en la incidencia delictiva con la que el estado inició el año —colocándose en enero como el tercero con mayor tasa de incidencia delictiva—, está el comportamiento cíclico de los delitos, pues añadió que entre finales e inicios de año suele haber un repunte.
Otro factor es el deterioro en materia de desigualdades, lo cual también podría estar repercutiendo en la tendencia al alza en los delitos.
“Otro tema es que claramente la situación del estado se va deteriorando en materia de desigualdad. Indicadores del Inegi muestran esto con relativa precisión: Querétaro es de los estados más desiguales y la desigualdad, esta falta de justicia social, subyace en los niveles de incidencia delictiva”, comentó.
Asimismo, otro factor podría ser el relacionado con condiciones específicas de cada contexto local. Por ello, señaló el especialista, aunque todavía falta tiempo para determinarlo como una causa, las obras en avenida 5 de Febrero podrían tener un efecto similar.
Incidencia delictiva
En febrero el estado tuvo 5 mil 21 presuntos delitos, colocándose en el décimo lugar nacional, de acuerdo con información del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
Sin embargo, respecto a la cifra de delitos por cada 100 mil habitantes, dio cuenta de una tasa de 209.4 ilícitos, cantidad que posicionó a la entidad en el sexto lugar nacional, sólo debajo de Colima, Quintana Roo, Baja California, Aguascalientes y la Ciudad de México. Además de que la tasa de Querétaro estuvo por encima de la media nacional, que fue de 128.6 delitos por cada 100 mil personas.
En febrero de este 2023, la incidencia delictiva aumentó 22.78% en el estado de Querpetaro. Si se le compara con febrero del año anterior, este aumento fue casi cuatro veces mayor que el incremento nacional, que fue de 6%.
Asimismo, Querétaro fue el tercer estado con mayor aumento anual en la incidencia delictiva, al estar debajo de Nayarit y de Tamaulipas.
También en febrero, registró una reducción de 8.6% en la incidencia delictiva, respecto a enero de este mismo año, así como en la mayoría de las entidades; esta caída lo colocó como uno de los siete estados con mayor descenso.
