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El estado de Querétaro concentró 25% de los trámites para restauraciones en edificios históricos que emitió durante el año 2017 el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) a nivel nacional, dio a conocer el coordinador Nacional de Monumentos Históricos del organismo, Arturo Balandrano Campos.
El funcionario recordó que la Ley Federal de Monumentos y Zonas Arqueológicos, Artísticos e Históricos establece que el patrimonio cultural de México puede ser propiedad privada o pública, por lo que si bien en el caso de las restauraciones, el INAH no cuenta con recursos propios para intervenir, sí puede normar este tipo de acciones.
“El INAH es una autoridad normativa, entonces cualquier intervención de mantenimiento o de construcción que se pretenda hacer en un monumento histórico ahí el instituto tiene atribuciones para normarla y determinar qué se puede y qué no se puede hacer, con objeto de poder conservar los valores patrimoniales de las casas referidas”, indicó.
Arturo Balandro refirió que, cada año, el instituto interviene para normar más de 13 mil proyectos al mes, a través del otorgamiento de autorizaciones a los propietarios para que se puedan restaurar o usar estas casonas en cuestión.
Riqueza
Destacó que Querétaro es una de las entidades con mayor riqueza en patrimonio cultural e histórico, por lo que solo el año pasado se emitieron 3 mil 200 permisos para estas obras.
“Querétaro es uno de los estados que más patrimonio tiene en todo el país, por eso hay una actividad intensa que se norma a través del centro INAH”, afirmó.
Balandrano Campos mencionó que el instituto tiene facultades para, incluso, demandar judicialmente a aquellos propietarios que no cuiden aquellos edificios que son considerados patrimonio histórico, como es la situación de casonas que existen en los Centros Históricos de San Juan del Río y Querétaro, aunque dijo que no cuentan con este tipo de procedimientos en la entidad.
“Podemos intervenir, pero la responsabilidad de la conservación es de los propietarios. El INAH puede intervenir si el propietario no conserva lo podemos requerir; si el propietario deja que se caiga lo podemos demandar judicialmente”, apuntó.
El funcionario federal se refirió en específico al Centro Histórico de San Juan del Río, donde —según autoridades locales— hay al menos 70 casonas con un deterioro considerable, señaló específicamente el edificio denominado el Portal de la Empacadora es uno de los que presenta mayor daño, el cual, afirmó, está en proceso de ser vendido y restaurado.
No obstante reiteró que el INAH sólo puede intervenir aquellos que son de su propiedad. Subrayó que ejemplos como el Museo de la Muerte, que es propiedad del municipio, es donde las autoridades locales deben destinar recursos para lograr su mantenimiento, mientras que el Instituto normará dichas obras.
“El Centro Histórico de San Juan es una joya para nosotros, es un tesoro nacional (…) El Portal de la Empacadora está en el proceso de venta. Nosotros esperamos que los próximos dueños sean conscientes de que el propietario va a valorar la importancia histórica y darle la restauración adecuada. En estos momentos el portal esta apuntalado y eso es adecuado”, puntualizó.
