El Jardín Guerrero se convirtió en una auténtica celebración con motivo del Día de la Familia, en donde los asistentes se divirtieron con payasos y músicos que actuaron en el escenario principal, y también accedieron a consultas gratuitas de la vista y salud bucal, cortes de pelo y para los más pequeños se instalaron talleres de dibujo, creación de papalotes, se montaron juegos tradicionales como canicas, dardos y demás atractivos.
También se instalaron puestos de comida y golosinas que se repartieron gratis, palomitas de maíz y agua de horchata, la combinación perfecta para que los asistentes saciaran las ganas de botanear y al mismo tiempo se refrescaran del sol abrasador de las 11:00 del día, que fue cuando iniciaron las actividades, mismas que siguieron hasta las 6:30 de la tarde.
En el escenario principal, varios miembros del gobierno municipal rindieron unas palabras para conmemorar la fecha, pidieron a las familias reforzar la comunicación con sus hijos y también premiaron a los niños ganadores del concurso de dibujo, en el que contaron la historia de su familia y mostraron algunas actividades que usualmente realizan para divertirse.
Ángel Daniel Rivera, de tan sólo cuatro años de edad, fue el más pequeño de los ganadores. Cuando pronunciaron su nombre, subió acompañado de su familia a recibir la bicicleta que le entregaron como premio; en el escenario presumió el dibujo que le otorgó la victoria, en este se muestra a su mamá Lucero de los Ángeles Hernández, su papá Omar Rivera, su hermano Óscar David Rivera y él mismo jugando a la pelota.
Lucero de los Ángeles, madre del pequeño de cuatro años, se dijo orgullosa de los valores que se han reforzado en su familia de generación en generación.
Ella y su esposo son originarios del Estado de México, pero desde hace 13 años viven en Querétaro. Los motivos para cambiar de residencia no fueron laborales, como suele ocurrir en la mayoría de las familias que llegan a vivir al estado; Lucero y Omar llegaron a Querétaro porque es una ciudad en donde aún se respetan los valores familiares, comenta Lucero.
“Muchas personas dicen que Querétaro todavía es muy familiar, somos del Estado de México, nos venimos por ese tipo de opiniones. Con tantas cosas que se dicen en la TV o en las canciones, nos gusta que aquí todavía se tenga un lenguaje amigable para los niños. El valor más importante es la comunicación y la responsabilidad, así lo hemos inculcado siempre, en toda mi familia”.
Su esposo Omar comparte que si se tiene una buena comunicación entre los integrantes de la familia, sobre todo con los hijos, se puede evitar que éstos caigan en manos de la delincuencia.
“Aquí en Querétaro notamos que sí se le da importancia a los valores familiares, de donde nosotros venimos no notamos que sea así. Si tenemos buena comunicación evitamos la delincuencia juvenil, por eso es tan importante”.
Una vez que terminó el evento, el pequeño Ángel Daniel bajó de los brazos de su madre para explorar su nuevo vehículo no motorizado. La familia completa, orgullosos del logro de su hijo más pequeño, se dispuso a disfrutar del día.
Los ganadores del décimo cuarto concurso de dibujo infantil El valor de la familia fueron: en la categoría A de cuatro a seis años, en tercer lugar Ricardo Miranda Hernández; en segundo lugar, María Loreto Hernández González y en primer lugar Ángel Daniel Rivera Hernández.
En la categoría B de siete a nueve años, en tercer lugar, Jesús Antonio de la Torre Reséndiz; en segundo lugar, Luis Alfredo Bustamante Gómez, y Emmanuel Justo Apolonio; y en primer lugar Julio César Castañón Arredondo.
En lo correspondiente a la categoría C de 10 a 12 años, los ganadores fueron: Eduardo Amador González, en tercer lugar; en segundo lugar José Campos Sánchez y en primer lugar, Tania López Rivera.
Finalmente los ganadores de la categoría D de 13 a 15 años fueron: en tercer lugar Paula Bustamante; en segundo lugar, Dulce María Villegas Vela; y en primer lugar, Alondra de Jesús Luna Montes.
El regidor Felipe Fernando Macías Olvera aseguró que la educación y la familia son la base para toda la sociedad, y dijo que si se anhela un mejor país y una mejor ciudad, esto se debe de comenzar a construir desde las familias, educando con valores, respeto, honestidad y tolerancia.
Un educación en valores, afirmó, se tiene que trasladar a todos los ámbitos de la vida diaria, la escuela, la casa, el trabajo, en la calle; porque ese reflejo influirá en construir un mejor país.