El producto legislativo incorpora la prohibición de discriminar por tener o no tener creencias religiosas; amplía el derecho a manifestarse para expresar creencias religiosas; consagra el derecho a ejercer la objeción de conciencia; reconoce el derecho de las personas para manifestar su voluntad respecto de sus restos mortales; y reconoce el derecho de las personas para prestar servicios voluntarios y contribuir al sostenimiento de cualquier asociación religiosa.
Hugo Cabrera subrayó que el ejercicio de estos derechos no puede ser un motivo para cometer delitos, faltas penadas por la ley, o para afectar derechos de terceros.
"El compromiso de nuestro país con los derechos humanos se ha consolidado. La presente iniciativa pretende modernizar y adecuar a nuestra realidad constitucional y social la Ley de Asociaciones Religiosas y Culto Público" destacó Hugo Cabrera.
Concluyó que la iniciativa parte de la importancia que revisten para nuestra sociedad las creencias y prácticas religiosas; de la misma forma, reconoce la diversidad de creencias religiosas y convicciones que existen en nuestro país.
mdgm