Roxana Ávalos Vázquez, presidenta de la Defensoría de los Derechos Humanos de Querétaro (DDHQ), informó que como una medida para remediar la situación financiera de ese organismo determinó despedir a 21 trabajadores.
La medida aplicará desde este 15 de marzo, representando un ahorro para la defensoría de 764 mil pesos, que servirá para reimpulsar el trabajo de los derechos humanos.
La titular de la defensoría señaló que las plazas se congelarán, por lo que la plantilla laboral quedará en 54 personas, de las cuales una estará en San Juan del Río y otra en Jalpan de Serra.
Precisó que muchos de los trabajadores duplicaban funciones, ganaban más por el mismo trabajo y fueron contratados en meses recientes.
