Los vehículos salen del estacionamiento de Plaza de las Américas. Conductores entregan el boleto a la señorita que atiende la caseta, ella lo toma, lo coloca en un lugar específico y levanta la pluma. El automovilista sale sin pagar nada. Para los visitantes de la plaza la medida aplicada por las autoridades de no cobrar las dos primeras horas de estacionamiento en las plazas comerciales es positiva, aunque para los empleados de la empresas operadoras de los estacionamientos ello puede implicar en el futuro próximo quedarse sin empleo.
Uno de los trabajadores, quien omite su nombre, dice que al faltar dinero en las empresas toman la medida fácil, despedir gente, pues al no entrar recursos no se pueden pagar sueldos al personal.
La señorita de la caseta luce aburrida en su puesto de trabajo. De ocho autos que salen de la plaza sólo dos pagan el estacionamiento. Uno paga 20 pesos, el otro 15. Son 35 pesos en cerca de media hora.
Plaza de las Américas es uno de los centros comerciales que cobra su estacionamiento a los clientes. El lugar es amplio y aunque siempre se encuentra sitio para aparcar, desde ayer luce un poco más ocupado.
El trabajador explica que hasta este jueves no se ve un aumento en el número de clientes que llegan al centro comercial. Será hasta este 15 de septiembre cuando la mayoría de la queretanos llegan a hacer compras para festejar el Grito de Independencia, así como el sábado y el domingo, días cuando más acuden los clientes a hacer compras o pasear.
El hombre, ya mayor, dice que las autoridades se deberían preocupar por otros asuntos, como acabar las obras en la calle de Ezequiel Montes, o atacar los problemas de inseguridad. El empleado muestra su preocupación por su futuro, pues la empresa al no tener tantos ingresos tendrá que prescindir de algunos de sus trabajadores.
Los clientes de Plaza de las Américas se congratulan con la medida de no cobrar en los estacionamientos las primeras dos horas, aprobada por el Cabildo de la ciudad de Querétaro, pues pueden hacer sus compras con calma y sin pensar en lo que les cobrará la plaza por usar su estacionamiento.
Un cliente ingresa a la plaza a las 14:15 horas. Sale hora y media después, con boleto sellado y no paga nada. En un momento desconfía, pues por la mañana aún la plaza comercial cobraba el estacionamiento, en el transcurso del día las autoridades se hicieron presentes en algunas plazas comerciales, para confirmar si se aplica la medida, en caso contrario son amonestados, si vuelven a cobrar, las multas serán económicas y elevadas.
La medida, nueva en la capital, ya aplica tiempo atrás en el municipio de Corregidora, donde los centros comerciales deben de ofrecer de manera gratuita el estacionamiento a sus clientes.
La medida, aunque impopular entre las empresas operadoras de los estacionamientos de las plazas comerciales, para los clientes resulta positiva, pues así no tienen que gastar en dejar sus autos en un lugar seguro mientras llevan a cabo sus compras.
“La gente no piensa en nosotros”, dice el empleado, quien es observado por su joven compañera desde la caseta. El rostro de ambos es de incertidumbre, pues el negocio de la empresa para la cual trabajan corre peligro de perder la mayoría de sus ingresos.
“No sabemos qué pasará. No nos han dicho nada”, apunta el hombre mientras se encoge de hombros y entrecierra un ojo, deslumbrado por los rayos del sol que rebotan en el cemento y lastiman.
El negocio también implica dar mantenimiento a las boleteras automáticas, a las plumas, al equipo de cómputo, dice el empleado. “En eso no se fijan las autoridades. Eso no lo pensaron cuando aprobaron la medida”, subraya.
Los automóviles siguen entrando y saliendo de la plaza. Por un lado toman el boleto y por el otro la empleada los toma y abre la pluma, sin recibir nada a cambio. Son buenos días para las compras por las fiestas patrias, también muchos ciudadanos, conocedores de que cobran el estacionamiento en la plaza, deciden acudir al primer cuadro o a otros centros comerciales a realizar sus compras, donde el estacionamiento no lo cobren.