Luego de que se informara sobre una reducción de 29.6% a los recursos destinados para obra pública y otros programas en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2017, la delegación local de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) solicitó optimizar los recursos y evitar subejercicios por parte de la autoridad.
Alejandra Vega Reyes, presidenta de la CMIC en Querétaro, señaló que con este tipo de recortes se afecta a un sector sumamente productivo, sin que se proceda de igual forma en otros casos.
Afirmó que se trata de una preocupación que surge entre el gremio a nivel nacional, pues impacta a todos los estados del país y es una de las principales causas que genera decrecimiento en el sector.
“La situación económica que actualmente vivimos a nivel nacional es delicada, y una de las peticiones que le hemos hecho al gobierno del estado es que no haya subejercicio de los recursos federales; que realmente se invierta en obras que sean productivas, que sean importantes y que se necesiten para el estado”, dijo.
Vega Reyes refirió que de 2014 a 2015 se registró un incremento de 14.5% en el número de empleos que genera la industria de la construcción a nivel estatal, tratándose de personas que aseguradas y formalizadas temporal o permanentemente ante el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
“La construcción es un sector sumamente productivo, y en cambio hay sectores como los partidos políticos, la cámara de senadores y de diputados, que no producen y participan de forma importante en el gasto público a nivel federal. No le vemos caso a que se afecte tanto a un sector productivo y no a sectores que no son productivos económicamente”, sostuvo la empresaria.
Vega estableció que ante el pronóstico económico que se avecina para el año entrante una prioridad para el gremio consiste en asegurar que las obras licitadas en el estado sean ejecutadas por constructores locales. Así, los socios de la cámara apuestan por generar convenios que les permitan acceder a proyectos de mayor tamaño.
Se tiene identificado que si bien el 90% de la obra pública está en manos de empresas locales, el 10% restante, ejecutado por empresas foráneas, corresponde a las obras de mayor tamaño.
Vega recordó que el 90% de las constructoras socias de la CMIC son mipymes que muchas veces no cuentan con la capacidad y respaldo financiero para asumir compromisos de gran envergadura.