En el estado de Querétaro se debe custodiar la paz social y luchar por conservarla, aseveró Faustino Armendáriz Jiménez, obispo de la Diócesis de Querétaro ante la inseguridad que existe en la entidad y al expresar que debe existir justicia en el proceso legal en contra de Javier Duarte, ex gobernador de Veracruz, quien fue detenido este sábado por la Procuraduría General de la República (PGR), acusado por enriquecimiento ilícito y malversación de fondos públicos.
“Lo más importante, no es solamente que haya una percepción generalizada de que uno es el factor fundamental (una sola persona) para que exista tanta corrupción en México. Detrás de uno, seguramente se tiene que buscar a toda esa cultura de corrupción que hay y quienes están detrás”, agregó.
Guerra reconoce a instituciones.
Por su parte, el diputado federal por Querétaro, Braulio Guerra, aseguró que con esta aprehensión no se termina la corrupción en el país; sin embargo, reconoció a las instituciones de Justicia y dijo que es un paso trascendente y un compromiso por la lucha en contra de quienes se sirven del servicio público para si mismos.
Aseguró que “la captura representa no solamente la lucha contra la impunidad y la corrupción, sino también el enojo, la irritación y el encabronamiento de todos los mexicanos por aquel o aquellos que se sirven en provecho propio de los recursos que son de los mexicanos”.
Dijo que como militante del PRI se siente avergonzado por el caso: “Me da pena que Duarte haya militado en este partido”.