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Querétaro está en los primeros 10 lugares de acoso cibernético en el país, situación que no se denuncia ni se atiende por parte de las autoridades, una opción es demandar por daño moral, pero en las redes sociales los perfiles son falsos, por lo que los casos quedan impunes, afirmó Mayra Alejandra Dávila Alvarado, coordinadora del Frente Nacional para la Sororidad en el estado.
Señaló que en el mapeo que tiene la organización que representa, tiene un catálogo de violencias sexuales cibernéticas, una de ellas es el acoso, entendido cuando a las chicas o chicos, a través de redes sociales se les molesta al pedirles su número telefónico, mensajes acosadores en las fotos y robo de imágenes.
En la mayoría de los casos, las víctimas fueron violentadas a través de la exhibición pública de imágenes privadas que alguna vez hayan compartido con alguna persona de confianza.
“Hay varias páginas en Querétaro que se dedican a robar perfiles de chicas, a venderlas como prostitutas. Hay algunas que dan un número de cuenta y ponen los datos completos de las chicas y ellas ni siquiera saben. Esos casos son los que tenemos mapeados en Querétaro”, indicó.
Aseveró que también se da un acoso para obligarlas a compartir datos de sus amigas, porque tienen alguna foto de ellas menores. Son muchos los delitos, aseveró, que se catalogan dentro de esta tipificación.
Explicó que la mayoría de los casos son entre jóvenes de último año de secundaria a la preparatoria tanto en escuelas públicas como privadas.
“Soy de la Sierra Gorda y empecé esta lucha porque a mí me pasó [hace unos años], y no quise dejar impune mi caso, porque cuando quise denunciar no había a quién acusar porque el perfil a donde habían subido una foto mía era falso. Entonces, no había a quién castigar, aun cuando yo tenía mensajes donde el responsable se burlaba de una situación. A partir de ahí me empecé a dar cuenta de las páginas donde se subían tantas cosas”, apuntó.
Mayra relató que a pesar de que sabía quién era el responsable de los ataques en su contra, cuando quiso entablar una denuncia no se pudo. Narró que en su caso subieron una foto de ella a un perfil falso, cuando fue candidata al Premio Estatal de la Juventud, y lo hicieron para “tirar” su candidatura.
“Cuando subieron la foto yo estaba en Comitán de Domínguez, Chiapas, en un concurso nacional de oratoria, representando al estado. Sí supe quién había sido el responsable, pero cuando quise ir a denunciar, y sólo me decían que denunciara por daño moral, pero también había que comprobarlo, y no había forma de hacerlo, pues el perfil era falso. Ahí me dí cuenta que la Policía Cibernética de Querétaro no tiene esa sensibilidad para trabajar en el tema”, añadió.
Puntualizó que debido a ello, harán pública una iniciativa de ley, el próximo sábado durante un foro en la Facultad de Ciencias Políticas de la UAQ, para tipificar de manera clara el acoso cibernético, al tiempo que precisó que el diputado Carlos Lázaro Sánchez Tapia es el único que se ha interesado en apoyar, a nivel local, la iniciativa, tanto para castigar como para prevenir los tipos de violencia cibernética.