Atraído por la calidad de vida, la planeación urbana de la ciudad, el clima y las oportunidades de trabajo, Juan Carlos Gómez Mata, llegó a Querétaro hace nueve años y ve un futuro promisorio para él, “me veo totalmente establecido aquí, aquí me casé y es en donde estoy formando una familia, veo un futuro con oportunidades”.
Diseñador gráfico de profesión, actualmente se desempeña como gerente de operaciones de la empresa Gebesa, dedicada a la fabricación de muebles para oficina y con 46 años de edad, explica que antes de llegar a Querétaro vivió en Metepec, en la zona metropolitana de la ciudad de Toluca, Estado de México, durante 11 años.
“El clima tan frío de la zona me hizo buscar una mejor opción y Querétaro fue esa opción”, asevera.
Antes, la razón por la cual salió de la Ciudad de México fue la inseguridad, pues fue víctima de un secuestro expres en la capital y eso fue el detonante para que saliera de la ciudad, aunque tenía planes previos para salir, por la competencia tan dura por las oportunidades en su área de trabajo.
Subraya que el año que salió de la universidad hubo 10 mil egresados más de la misma carrera, Diseño Gráfico. Agrega que a la hora de buscar empleo se dio cuenta de la cantidad de personas que buscaban una vacante para el mismo puesto, por lo que decidió moverse a una ciudad cercana y en la que no faltara el agua, por lo que la primera opción fue Metepec, aunque en Toluca si falta el agua.
En 2007 llega a Querétaro, donde uno de sus hermanos vivía desde 2005, además de una hermana, a quien le ayudó, un año antes, a conseguir un empleo en una franquicia donde trabajaba en la Ciudad de México, pero en Querétaro. Por lo que tenía conocimiento de la calidad de vida de la ciudad.
Señala que lo que lo atrajo de Querétaro fue justamente “la calidad de vida que veía en Querétaro. Lo que me llamó mucho la atención fue la planeación que había para el crecimiento de la ciudad. Encontré avenidas amplias, construidas en zonas donde apenas iniciaba el desarrollo de fraccionamientos residenciales”.
Sentado en una de las sillas que se diseñan en la empresa que trabaja, rodeado de muebles de oficina, Carlos recuerda que aquí vio también oportunidades de trabajo, pues tiene experiencia en la industria del mueble para oficina, aunque luego cambió a un ramo relacionado con las ventas, a donde también encontró oportunidades, pero ahora regresó al mueble.
Indica que lo más complicado para adaptarse cuando llegó a Querétaro fue el clima, pues venía de vivir 11 años en el clima frío de la capital mexiquense, luego el tamaño de la población, pues al ser una ciudad chica las oportunidades de ventas eran menores.
“Sin embargo, lo compensaba la calidad de vida. No me molestaba el ritmo de la ciudad, porque comparado con el ritmo de vida de la Ciudad de México se me hace más sano vivir con menos acelerado y menos presionado”, comenta el diseñador gráfico.
Sobre los comentarios de los queretanos en contra de los que vienen de otras entidades, dice que nunca tuvo problemas, pues en su entorno se rodeó por gente foránea, al tiempo que pocos queretanos, y aunque ha llegado a escuchar los comentarios de los queretanos de quienes vienen de la Ciudad de México, considera que tienen ganada esa fama (risas), pero no se puede generalizar.
Con voz pausada, Carlos dice que Querétaro le ha dado oportunidades de trabajo, una mejor calidad de vida, pues vive más tranquilo, a pesar de que por el crecimiento de la ciudad aumentan los congestionamientos viales.
“Sigue siendo una ciudad con un ritmo de vida todavía tranquilo, comparada con la Ciudad de México, sin los índices de violencia o de delincuencia que hay en otros lugares. Me siento más seguro en Querétaro. La oportunidad de conocer los alrededores y las distancias. Aquí, si no es hora pico, es fácil cruzar la ciudad dos o tres veces sin problemas”, abunda.
Por su actividad económica, al tener mucha relación con la apertura de negocios, Carlos asevera que el crecimiento en la economía local influye para que a él se le abran mejores expectativas laborales.
“El crecimiento de las zonas industriales en Querétaro es muy significativo por la ubicación que tiene, para poder enviar mercancías a todo el país o inclusive para enviarlas al extranjero. Eso me lo han dicho clientes, lo cual lo hace muy atractivo. Por eso, el crecimiento de las inversiones ha logrado que el volumen de compra de insumos, materias primas, de todo, aumente. Veo una gran oportunidad”, precisa.
En lo personal, puntualiza que se ve a futuro totalmente establecido en Querétaro, pues aquí se casó, y es donde forma una familia, por lo tanto ve un futuro con oportunidades para seguir creciendo.
“Veo un futuro para tener un mejor lugar para vivir, para formar una familia más amplia, y también por lo atractivo de la ciudad, para generar nuevos negocios de aquí a otras zonas del país”, acota, Juan Carlos, quien en Querétaro encontró estabilidad emocional y laboral, en una urbe que aunque crece día con día, ofrece una vida que pocas ciudades del país ofrecen en la actualidad.