El Consejo Estatal Contra las Adicciones (CECA) lanzó la convocatoria para la apertura de cuatro nuevos centros de rehabilitación, dos de ellos en la zona serrana, informó el comisionado de la dependencia, Guillermo Tamborrel.
Explicó que los interesados podrán presentar su propuesta y, en caso de ser aprobados por un comité de selección, recibirán 100 mil pesos para apoyar a la puesta en marcha del Centro.
Este proyecto forma parte de la estrategia 2017 para los centros de rehabilitación (o anexos) para mejorar la atención que se brinda en diferentes puntos del estado.
“Contempla el apoyo a la apertura de cuatro centros, dos de ellos van a ir a la zona serrana, donde sólo hay uno de éstos en Pinal de Amoles, trabaja en condiciones precarias, buscamos que se abra uno exclusivo para mujeres, los otros dos podrán instalarse en cualquier parte del estado”, explicó.
Agregó que los otros dos deberán ser para menores de edad, con la exclusividad de que uno sea para mujeres y otro para hombres.
La nueva estrategia busca regular los centros de rehabilitación, de forma paralela se entregarán distintivos para garantizar la calidad de sus servicios.
“Diseñamos una nueva estrategia que fue presentada a los centros de tratamiento y a grandes rasgos consiste en implementar un nuevo esquema de distintivos, un esquema estatal de reconocimiento”, comentó.
Actualmente existe el reconocimiento del Consejo Nacional Contra las Adicciones (Conadic) que sólo seis centros de internamiento de Querétaro lo tienen, por lo que se crearon tres niveles de reconocimientos a cargo del CECA.
“La idea es que suban a un primer distintivo en donde los vamos a ayudar, incluso económicamente, los vamos a seguir ayudando para que lleguen al segundo distintivo; en ese punto también los vamos a apoyar para que alcancen al tercero, que ofrece el Consejo Nacional contra las Adicciones”, dijo.
Recordó que el internamiento, para tratar las adicciones al alcohol y demás drogas, es la última instancia para la rehabilitación de un adicto, debido a que existen tratamientos como terapias individuales o grupales para superar la problemática; sin embargo, sólo en los casos más graves, que son los menos, es que se sugiere el internamiento residencial con expertos.
“No todas, al contrario son las menos, las personas que tienen un problema de alcohol o drogadicción que requieren un internamiento, sólo quienes necesitan un tratamiento de contención y es fundamental que ofrezcamos mejores espacios, tratamientos más eficientes y más eficaces, en donde se respeten a plenitud los derechos humanos”, finalizó Tamborrel Suárez.