La estancia de Migrante González y Martínez A.C generará un contrato con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes y el gobierno municipal para obtener en préstamo la vieja estación de ferrocarril Bernal y con ello seguir operando en este sitio a favor de los centroamericanos que transitan por esta zona.
Desde hace más de 10 años la Estancia del Migrante ha empleado un viejo cuarto de la Estación para reguardar en el los alimentos y prendas de vestir que se entregan a los centroamericanos que viajan a través del tren por la zona.
En 2014 representantes de la Empresa Ferromex ordenaron el desalojo de la estación de ferrocarril para impedir el uso del inmueble que se ubica a pocos metros de las vías del tren, zona que desde este año está siendo delimitada; luego de gestiones entre representantes de la estancia del Migrante y autoridades municipales, se logró obtener una prórroga y evitar el desalojo.
Sin embargo, durante este tiempo la asociación civil ha operado sin contar con certeza de seguir en este sitio, al carecer de un documento que les otorgue algún derecho para almacenar los víveres como hasta ahora lo han hecho.
Mario González Melchor fundador de la estancia del Migrante explicó que a partir del siguiente año la estación Bernal, estará a cargo de la asociación civil mediante el convenio de comodato que se firme antes de que concluya este 2016.
Autoridades de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, con la gestión del gobierno de Tequisquiapan, manifestaron la disposición de ofrecer el espacio para que de forma permanente pueda operar la estancia del Migrante, confirmó a la vez el presidente de la agrupación Martín Martínez.
Mario González aclaró que el inmueble no será cerrado para uso exclusivo de los voluntarios de la estancia, al tratarse de un monumento protegido por su valor histórico y que también es sitio de atracción para visitantes a su paso por Tequisquiapan.
Agregó que para la asociación es importante contar con un espacio en el cual pueda resguardarse el voluntariado luego de las constantes agresiones cometidas por personal de vigilancia de las vías, hacia los integrantes de la asociación y hacia los centroamericanos en circulación por la zona.
“Las agresiones de parte de las empresas de vigilancia ya eran muy recurrentes, esto era peligroso hasta para los voluntarios de la Estancia del Migrante por eso es que requeríamos de un sitio en el que se les permita resguardarse”.
González aclaró que los voluntarios de la asociación continuarán entregando alimento y prendas de vestir a los migrantes a la orilla de la vía, para permitir que los centroamericanos puedan recibir ayuda sin tener que descender del tren, con el riesgo de ser agredidos por vigilantes que rondan en la zona.
En los últimos 10 años ha buscado apoyo del estado para crear otros sitios destinados a migrantes en tránsito, sin obtener éxito, por ello la entrega en comodato de la vieja estación representará un avance en las gestiones para contar con documentos que amparen el trabajo de la agrupación sobre las vías.