El abuso sexual infantil no se denuncia, pues sólo se conoce 2% de los casos de este crimen, afirmó Fernanda Lazo, presidenta de Corazones Mágicos, al tiempo de señalar que los adultos o no les creen a los niños o tratan de minimizar el hecho, pues en la mayoría de los casos el responsable es un familiar cercano o un conocido.
Señaló que los menores dependen de un adulto para poner una denuncia y por ello este tipo de delitos quedan sin castigo.
Explicó que en México hay pocos estudios sobre el tema, lo que sí hay, como antecedente, es el ejercicio que hizo en 2012 el entonces IFE, la Consulta Infantil y Juvenil, donde hacían dos preguntas sobre abuso sexual.
En esa ocasión participaron en Querétaro poco más de 19 mil menores, entre seis y nueve años de edad, y 15.1% dijo que en su casa tocaban su cuerpo y pedían que no lo contaran; 12.7% dijo que en la escuela tocaban su cuerpo y pedían que no lo hicieran.
“Estamos hablando de una problemática verdaderamente alarmante que está afectando a uno de cada cuatro niños y que hay muchos pocos esfuerzos destinados a la rehabilitación de los menores. Aquí la pregunta es qué estamos esperando de estos chiquitos el día de mañana si no están recibiendo el tratamiento especializado”, sostuvo.
Agregó que en el caso de las escuelas no se puede decir que hayan aumentado los casos de abuso sexual, pero lo que aumenta es la denuncia, pues se tiene más información y se comienza a hablar más del tema, la gente está más consciente de esta situación.
La especialista apuntó que los familiares pueden identificar ciertos indicadores en los menores que han sufrido abuso sexual, como conductas sexualizadas que corresponden a adultos, “esa es una señal de alerta. Hay que recordar que en la mayoría de los casos de abuso sexual infantil no deja lesiones, por eso es difícil su detección, o si trae la ropa interior manchada de sangre o tiene problemas para caminar, esos son indicadores. También pueden presentar ansiedad, depresión, aislamiento, bajo rendimiento escolar.
Fernanda Lazo, junto con Calixto Corzo, presidente de la Junta de Asistencia Privada del estado de Querétaro, y Sergio Salmón, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), presentaron la campaña El buen gusto, sana un corazón, que durante noviembre posicionó al sector restaurantero como socialmente responsable y que toma acciones para prevenir y rehabilitar el abuso sexual. Participarán más de 20 restaurantes.