La higiene se refiere al conjunto de prácticas y comportamientos orientados a mantener condiciones de limpieza y aseo que favorezcan la salud de las personas. Las principales recomendaciones para cuidar la higiene en la preparación de alimentos son las siguientes:
El deterioro y la contaminación de los alimentos son provocados generalmente por bacterias, microorganismos capaces de producir toxinas y causar enfermedades a las personas que ingieren alimentos afectados, por lo que es importante evitar preparar alimentos cuando se está enfermo; tapar los alimentos al refrigerarlos; al recalentar alimentos ya preparados, hacerlo hasta que hiervan; de preferencia optar por alimentos recién cocinados; sacar la basura de la cocina diariamente; evitar el contacto entre alimentos crudos y cocidos.
Si se opta por comer en algún establecimiento público se aconseja revisar que las instalaciones donde se preparan los alimentos, así como los trapos para limpieza y los utensilios de cocina se encuentren limpios. Las personas que cocinan deben traer vestimenta limpia, cubrepelo, cubrebocas, uñas cortas, sin anillos, pulseras u otros objetos en las manos.
En las instituciones de salud públicas del estado de Querétaro, en 2017 se registraron 106 mil 741 casos de enfermedad diarreica aguda.