E l aceite en ebullición “chilla” en el comal donde Pueblito López, originaria de La Cañada, prepara las tradicionales enchiladas queretanas, cuya receta pasó de su madre a ella, y ahora una de sus hijas continúa con la tradición. Pueblito es una de las cocineras que participará en la Feria del Mole, la Nieve y la Enchilada, en El Marqués, los dos últimos días de abril.
Con la habilidad que dan los años dedicados a una actividad, Pueblito moja las tortillas en la salsa por ambos lados. Las saca y coloca en el comal, mientras sus ojos lloran por el humo. “Es que querían carbón”, dice mientras enjuaga sus lágrimas.
Los invitados a la conferencia de prensa donde el patronato de la Feria del Mole, la Nieve y la Enchilada presentó la cuarta edición de este evento gastronómico a realizarse 29 y 30 de abril a un costado de la alberca El Capulín, en La Cañada, se apresuran a formarse para recibir su orden, cortesía de los organizadores.
Narra que lleva 36 años vendiendo enchiladas, “mi mamá vendía, mi suegra vendía también. Desde ella viene la tradición y ahora mi hija también vende”.
Apunta que la auténtica y original enchilada queretana debe prepararse con chile guajillo, del ancho, así como papa, zanahoria, nopales, lechuga, queso, orégano y mucho gusto por hacerlas.
Platica que vende enchiladas los fines de semana, afuera de su casa, en La Cañada, además de cada vez que hay fiestas en ese sitio, uno de los más tradicionales del estado.
Señala que desde la primera edición de la Feria del Mole, la Nieve y la Enchilada ha participado en la celebración, a donde siempre la ha ido bien. Sigue platicando mientras sigue limpiando las lágrimas que salen de sus ojos por el humo.
Atrás de Pueblito, una fila de personas esperan su orden de enchiladas. Otros piden sus platos de mole, verde o poblano, el tradicional, pues. Poco importaron las dietas, pues los platillos, presentados de manera atractiva, hace que la boca se haga agua.
Las ventas los fines de semana, agrega, son buenas, pues de seis kilos de tortillas que compra vende todo, además de que vende los tradicionales guajolotes, otras de las delicias de la cocina queretana, que no hay que confundir con los pambazos, pues los sabores son diferentes.
Frente a Pueblito, su hija Sandra Alicia Uribe López va preparando las órdenes de enchiladas, que son colocadas en platones de barro, con su lechuga, papa, queso y crema, que ofrece a los ansiosos comensales que no pueden esperar ni un minuto más para probarlas.
Sandra explica que se dedica a la venta de enchiladas desde hace dos años, pero cuando era niña le ayudaba a su madre y aprendió a hacerlas, porque todos su hermanos se encontraban estudiando la escuela primaria y en la cooperativa del plantel educativo vendían guajolotes, por lo que el gusto por la elaboración de éstos y las enchiladas es algo que domina.
Las dos mujeres, continuadoras de una tradición continúan haciendo las enchiladas, hasta que los ingredientes se acaban por completo, dejando con el antojo a más de uno.
Antes, mientras Pueblito y Sandra hacían los preparativos para las enchiladas, el Patronato organizador de la Feria del Mole, la Nieve y la Enchilada, encabezado por su presidente, Rafael Jiménez, presenta la cuarta edición del evento culinario, que se llevará a cabo el 29 y 30 de abril.
Jiménez indica que esperan una derrama económica , señaló que se espera una derrama económica superior al millón de pesos, además de precisar que son la feria original, luego de que la semana pasada el Partido del Trabajo (PT) anunciara que realizaría el mismo evento por octava ocasión.
Subraya que esperan la participación de más de 250 productores de mole, nieve y enchiladas, además de artesanos oriundos de El Marqués. “El objetivo que este patronato ha trazado desde un inicio ha sido la promoción turística del municipio de El Marqués y, por otro lado, trata de incentivar la economía local. Es muy tradicional ver que productores de mole, nieve y enchilada comercializan estos productos artesanales, hechos sin ningún proceso industrial”, añade.
Los organizadores explican que durante los trabajos de la promulgación de la Constitución de 1917, Venustiano Carranza viajaba a La Cañada, donde era recibido por los habitantes con mole, nieve y enchiladas, de ahí que sea esta conjunción de platillos los que forman esta legendaria celebración.
Jiménez comenta que además de más patrocinadores, cada vez son más productores los que se suman a esta feria. Asimismo, subraya que este año el estado invitado es Oaxaca, que estará presente con una muestra de la Guelaguetza, así como la participación de productores de mole y mezcal.
Añade que la edición pasada tuvieron una asistencia de 25 mil personas, y para este año esperan a 30 mil, con una derrama de millón y medio de pesos.
Sobre la controversia con el PT, que presentó la semana pasada su propia feria, Jiménez precisa que no les preocupa, pues el área legal del patronato está haciendo su trabajo para exigir que se respete el nombre y la marca.
“Este patronato nunca ha organizado este evento gastronómico con algún tinte político o electoral, por el contrario, busca incentivar la economía local y el turismo. La parte legal del patronato se está encargando de hacer lo propio”, apunta, que es lograr que el PT se desista de organizar su feria, aunque asevera que “para todos sale el sol”.