El rector de la UAQ, Gilberto Herrera Ruiz, aseguró que se investigará, hasta las “últimas consecuencias”, para deslindar responsabilidades en el caso de los maestros aviadores de la Escuela de Bachilleres.
Durante la sesión de consejo y antes de iniciar con su informe de actividades, Herrera Ruiz dio a conocer a los consejeros los resultados de la auditoría hecha a la Facultad de Medicina y a la Escuela de Bachilleres, donde se encontró que en esta última unidad académica —específicamente en los planteles Norte y Sur— había 22 grupos en los que el docente titular de una materia no acudió a impartir sus clases, pero sí cobró; dos grupos en los que el maestro al frente de la clase no contaba con título universitario, y 15 más en los que se les permitió a docentes sin relación laboral con la UAQ impartir las clases.
Además, señaló el titular de la máxima casa de estudios del estado, también se encontró una presunta relación de académicos con funcionarios administrativos que recibían beneficios especiales.
Los directores de las facultades de Filosofía, Medicina, Ingeniería y Ciencias Naturales, Margarita Espinosa Blas, Javier Ávila Morales, Aurelio Domínguez y Teresa García Gasca tomaron la palabra para exigir que se encuentre a los responsables de las fallas administrativas que pusieron en riesgo las calificaciones de cerca de 800 alumnos, muchos de los cuales se encuentran en el proceso de ingreso a las licenciaturas de la misma UAQ.
Entretanto, el Consejo Universitario aprobó que se respeten las calificaciones obtenidas por los 800 alumnos afectados, y además que sea la Secretaría Académica Universitaria la que supervise el reparto de cargas horarias para la Escuela de Bachilleres, de cara al próximo semestre, para evitar que se vuelva a dar esta situación irregular de asignación de profesores.
La directora de Bachilleres, Rosa María Vázquez Cabrera, se quejó de la forma en que se había realizado la auditoría, y exhibió un audio en el que se escucha a personal de la oficina del abogado general haciéndoles preguntas sobre la asistencia de sus profesores a los estudiantes, a lo que el mismo consejero alumno de esta unidad, Abraham Martínez Núñez, reviró, manifestando que en ocasiones “sólo en grupo es posible que los estudiantes tengan valor para hablar de las cosas que están mal con los maestros. Con las auditorías se empezaron a detectar las irregularidades, fueron muchísimas, y eso es algo bastante preocupante.
“Sí debe haber responsables en la administración, algo debió haber pasado, algo está mal, y por eso es este problema”. Mientras que la consejera alumna de la Facultad de Ciencias Políticas criticó la posesión de este audio, señalando que la filtración pone en riesgo la confidencialidad de las evaluaciones por parte de los alumnos.
El consejero representante de la Federación de Estudiantes Universitarios de Querétaro, Óscar San Román, denunció presiones por parte de las autoridades de la Escuela de Bachilleres, apuntando que alumnos aseguraron que son obligados bajo amenazas a manifestarse contra las evaluaciones a docentes.
Además de varias cartulinas con leyendas contra el rector Herrera, sostenidas por docentes simpatizantes del comité del Supauaq que encabeza Saúl García Guerrero, también se dejó ver una manta colocada en el auditorio Fernando Díaz Ramírez y firmada aparentemente por aspirantes del curso de inducción de las licenciaturas en Medicina y Odontología, que manifestaba la exigencia de la renuncia de Rosa María Vázquez al frente de Bachilleres, “por poner en riesgo nuestra oportunidad de ingreso a licenciatura”.