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Querétaro se ubica en la séptima posición a nivel nacional donde la clase media representa más del 50% de su población, con el 50.5% de los hogares en este nivel socioeconómico, según el reporte Cuantificando la Clase Media 2010-2020, del Inegi, donde muestra el comportamiento que ha tenido esta clase social en la última década.
En cuanto a la medición porcentual, Querétaro se coloca por arriba de la media nacional, con 42.2% de los hogares que se ubican en esta clasificación.
La Ciudad de México (CDMX) es la entidad que mayor porcentaje registra, con el 58.9% del total de sus hogares en este estrato social; le siguen Colima, con 54.6%; y Jalisco, con 53.6%.
Además, el estado es cuarto lugar nacional por el porcentaje de los hogares que forman parte de la clase alta, con el 2.4% del total, por arriba de la media nacional, de 1.2%.
En cuanto al porcentaje de los hogares en clase baja, Querétaro se coloca en el sexto sitio con el menor porcentaje de hogares en este estrato social, con el 47.1% del total; está por debajo de la media nacional, de 56.6%.
Los ingresos promedio mensuales de un hogar perteneciente a la clase media en el ámbito urbano son 23 mil 451 pesos; los de clase alta, casi 78 mil pesos mensuales; y los de la baja, 12 mil 977 pesos mensuales.
En el entorno rural, los ingresos de la clase media son en promedio 18 mil 569 pesos mensuales y los de la baja, 9 mil 313 pesos cada mes, señala informe.
Comportamiento nacional
En 2010, en el país el 42.4% de los hogares pertenecían a la clase media, lo que en términos poblacionales equivalía a 39.2% de la población 44 millones de personas; mientras que en la clase alta se ubicaban sólo dos millones de personas, equivalente al 1.7% de la población nacional.
Por su parte, la clase baja en dicho año representaba 59.1% de la población, es decir, 66 millones de personas
Para 2018, la clase media aumentó a 43.7%, mientras que la clase alta se redujo a 1.5% y la clase baja también se contrajo porcentualmente a 55.8%.
Sin embargo, en tan sólo dos años, este escenario mostró un cambio significativo, pues para el año 2020 la clase alta se ubicó en alrededor de un millón de personas, equivalente a 0.8% de la población; la clase media pasó de ser 42.7% a 37.2% de la población, lo que representó una reducción de 6.2 millones de personas al pasar a agrupar a un poco más de 47 millones de mexicanos; la clase baja, en contraste, aumentó al pasar de 55.8% de la población a representar el 62%, un incremento de 8.7 millones de personas.
Es decir que en 2020 se frenaron los avances que se tenían en la incorporación de cada vez mayor número de personas a la clase media, mientras que el crecimiento del grupo considerado como clase baja creció en más de ocho millones.
