El presidente de la columna de peregrinos de Querétaro a Tepeyac, Jaime Rojo, advirtió a disidentes que además del riesgo al que se exponen, podría ser que en los estados por los que atraviesen, rumbo a la Basílica de Guadalupe, se les impida el ingreso, toda vez que las autoridades están advertidas respecto a que la peregrinación se suspendió.
Tras un recorrido por los puntos en los que usualmente salen los peregrinos, se comprobó que la mayoría son obedientes, pero lamentablemente sí se observó un grupo de cinco hombres, entre ellos un niño, que recorrían el camino a la Ciudad de México.
Llevaban chalecos y banderas de la asociación de peregrinos, por lo cual se acercó a ellos un integrante de la comisión de Ecología, quien les advirtió el riesgo en el que se ponían y que es muy posible que no los dejen atravesar las autoridades de los diferentes estados.
Esas cinco personas se limitaron a responder que ya verían cómo le harían y siguieron su camino, por lo cual estimó que se trata de quienes año con año se niegan a respetar las reglas.
Peregrinar implica una gran responsabilidad, y alto riesgo ante la contingencia, de ahí que los 12 decanatos que conforman la Diócesis determinaron cancelar las actividades de este año, lo que implica que no participarán los 30 mil peregrinos inscritos como ya es tradición.
La confirmación respecto a que Querétaro no peregrina se emitió a las autoridades de Hidalgo, Estado de México y Ciudad de México.
“Posiblemente en otros estados no les permitan pasar, porque nosotros, así como mandamos las cartas año con año para informar que va a pasar la peregrinación hoy lo hicimos dando a saber que se suspendía porque inclusive había mucha inquietud”.
Tanto Querétaro como Guanajuato podrían regresar al semáforo rojo este lunes 19, lo mismo podría ocurrir con Hidalgo, el cual forzosamente se atraviesa en peregrinación.
Los monitoreos continuarán, pero los disidentes son personas que no entienden de razones, lo que demuestran cada peregrinación cuando, con improperios, se niegan a regresar a la columna.
Por último, sostuvo que el verdadero peregrino se ha quedado, viviendo la peregrinación en casas y en familia.