Militantes de Morena se deslindaron de cualquier implicación a Celia Maya y Jesús Méndez en el proceso que provocó que Ángel Balderas fuera expulsado del partido.
En conferencia de prensa, los morenistas Erasmo García Flores, María del Carmen Gómez Ortega y Joaquín Arturo Hernández Soto, afirmaron que no se trató de un proceso en grupo, que ellos mismo fueron los que directamente solicitaron se sancionara dentro de Morena la violencia que el político realizó en materia de género.
Sostuvieron que, en lugar de responder a las acusaciones por violencia, Balderas Puga dedicó a decir lo valioso que es él para el partido.
Los tres militantes acusaron a la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia de su partido de intentar proteger al exdirigente del Consejo Estatal de Morena, pues la instancia se negó a estudiar todas las solicitudes que emitieron para que fuera sancionado.
Derivado de la falta de respuesta de la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia fue que recurrieron al Tribunal Electoral del Estado de Querétaro (TEEQ), es que ordenó a la Comisión estudiar los casos que le habían sido ingresados.
En total son 4 procedimientos diferentes los que llevaron a sancionar a Balderas Puga con la expulsión. Se trata de expedientes que se fundamentaron y, aunque cada uno presentaba casos independientes, la Comisión determinó conjuntarlos dentro de un mismo análisis.
“Al menos, cuatro quejas diferentes que, al coincidir en el fondo, la Comisión [Nacional de Honestidad y Justicia] determinó acumular en un sólo expediente, cada una tiene su propio número de expediente, cada una se sustentó de manera particular y en cada una hubo un representante legal diferente”, afirmó Gómez Ortega.
La solicitud de expulsión que emitieron fue para que las sanciones que ya había aplicado contra Balderas Puga el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) también se retomaran para castigarlo, toda vez que las faltas en las que incurrió se encuentran prohibidas dentro de los lineamientos de Morena.
Explicaron que era indispensable que ese delito de violencia política en razón de género también fuera sancionado por Morena, para que el partido actuara de en congruencia a los documentos básicos del partido.
Gómez Ortega dijo que fueron diferentes las quejas que ingresaron contra Balderas Puga, pues tuvieron como base la necesidad de que Morena fuera un partido con apego a su normativa estatutaria. Morena prohíbe cualquier tipo de violencia simbólica, física y política en contra de la mujer.
“Desde junio del año pasado, el Tribunal Electoral de Querétaro y la Sala Regional Monterrey del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación comprobaron que Balderas Puga realizó expresiones consideradas como conductas graves de violencia política en razón de género, por lo que las sentencias que determinaron, entre otras sanciones, su inscripción en los registros estatal, del IEEQ, y nacional, del INE, de personas sancionadas en materia de violencia política contra las mujeres en razón de género”, dijo Gómez Ortega.