Todas las plazas comerciales y cerca de 80% de los comercios permanecerán cerrados durante la jornada nacional de sana distancia que terminará el 30 de abril, informó Carlos Habacuc Ruiz Uvalle, presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (Canaco, Servytur).
Recordó que el acuerdo federal, relacionado con la emergencia sanitaria causada por el Covid-19, indica que desde el 30 de marzo quedan suspendidas todas las actividades no esenciales en el país.
Los negocios que vendan artículos no necesarios deben cerrar y esperar las nuevas disposiciones.
En la zona metropolitana hay 60 plazas comerciales, 12 de ellas afiliadas a Canaco.
“Todas las plazas comerciales deben cerrar y entre 80 y 90% de los comercios no sólo de la Cámara sino de todo el estado; en el sector comercial representamos a cerca de 360 mil empleos en el estado, que son 60% de los empleos formales del estado, no quiere decir que todos van a parar” explicó.
De modo que más de 250 mil empleados deben estar en sus hogares participando de la jornada de sana distancia, que implica no salir de su hogar a menos que sea estrictamente necesario.
El acuerdo de salud indica que sólo las actividades esenciales deberán continuar, es el caso de la producción, distribución y venta de alimentos, bebidas no alcohólicas, servicios públicos, servicios de salud y seguridad.
Habacuc Ruiz reconoció que aún hay comercios abiertos, pues la autoridad pública, así como la cámara están en el proceso de informar a todos los micro, pequeños y medianos empresarios las disposiciones federales.
De manera que esperan que este fin de semana ya todos acaten 100% los mandatos de la autoridad, que tienen por objetivo disminuir el flujo e interacción de las personas para disminuir la velocidad de la transmisión del virus Covid-19.
Comprometen esfuerzos para pagar salarios. Carlos Habacuc explicó que los comercios, en promedio, manejan un flujo de efectivo de 23 a 30 días, es decir, podrían solventar esos días sin ganancias; por lo que hay comercios que han legado a acuerdos con sus trabajadores para el tema económico.
Reconoció que hay dos tipos de patrones: los que no quieren y los que no pueden acatar la ley, de pagar un mes de salario; en el caso de los primeros, se deberá aplicar la ley y las sanciones correspondientes, y quienes no pueden están buscando esquemas y acuerdos comunes con sus colaboradores para garantizar la operación —una vez que acabe la emergencia— del negocio sin que hay grandes recortes financieros.
Expuso que están en trabajo permanente con las autoridades, por lo que esperan los anuncios de programas de apoyo desde la federación y el estado para conocer de qué maneja podrán sobrellevar la emergencia.
“Estamos en contacto diario, tenemos reuniones diarias y a su vez con el gabinete; estamos ciertos que primero es la salud, segundo el acatamiento de la ley; y todavía no hay definición de los apoyos, estamos subiendo las inquietudes de los comerciantes y dependemos mucho de las decisiones federales”.