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Enrique de Echávarri Lary, coordinador general de la Unidad de Servicios para la Educación Básica en el Estado de Querétaro (USEBEQ), informó que las escuelas del sistema público cuentan con protocolos y reglamentos que, al inicio de cada ciclo escolar, son firmados de común acuerdo con los padres y madres de familia.
En ese documento, que incluye el reglamento de la institución, las y los tutores se comprometen a estar en tiempo y forma a la hora de la salida de clases, siendo ellos los responsables de la integridad de los menores.
Luego del secuestro y asesinato de la niña Fátima, en la Ciudad de México —quien fue recogida por una mujer en su escuela— en Querétaro, dijo el funcionario, cada mamá y papá define la logística para recoger a los menores.
Además, reconoció el compromiso de los maestros para organizarse en guardias y vigilar a los niños en caso de que los adultos lleguen tarde a las escuelas.
Recordó que los profesores tienen un horario establecido para su jornada laboral y con base en él organizan sus actividades personales, aunado al proceso que se debe seguir en caso de que algún menor no sea recogido en la institución.
“Aquí la responsabilidad radica en los padres de familia, tienen que estar en tiempo y en forma; el magisterio queretano organiza de manera formal una guardia, pero tenemos que recordar que hay maestros que tienen doble turno, otras actividades, no podemos hablar de un horario o tolerancia, lo que pedimos es que los padres de familia estén en tiempo por sus hijos o determinen cómo se van”, dijo.
El funcionario indicó que se han presentado casos en los que los menores son trasladados a la Fiscalía General del Estado porque no recogen a los niños.
“Tenemos un magisterio queretano muy comprometido con la sociedad, ellos se organizan internamente para quedarse 15 o 20 minutos más allá de la jornada; en los casos extremos se entrega a los niños o jóvenes a las autoridades competentes, que son la fiscalía o procuraduría, que pasa media hora y no llegan, y esto también es una complicación”, detalló.
Recordó que, en preescolar, las niñas y niños sólo se entregan a los tutores que están autorizados y que deben identificarse mediante una credencial.
En este nivel existe un reglamento en el que las madres y padres aceptan la responsabilidad de estar a las 12 del día —que es la hora de salida en el sistema público— con una tolerancia de 15 minutos; los menores son entregados desde el salón de clase y en caso de no estar a tiempo o no responder, el celular aceptan que se dé visto a la Procuraduría de la Defensa del Menor y la Familia o autoridades policiacas.
En las primarias, también firman un reglamento en el que se indica el horario de salida, y en algunos casos, se resguarda a los niños en el interior de la escuela en caso de que noten que nadie los recoge.