Los verdaderos peregrinos se quedaron en casa, se declaró al dar por concluida la peregrinación Querétaro-Tepeyac que, derivado de la pandemia, por segunda ocasión se realizó a través de las redes sociales.
El obispo de Querétaro, Fidencio López Plaza, esperó a la entrada del templo a los presidentes de las columnas peregrinas, guías espirituales y jefes de grupo para que juntos ingresaran a La Congregación de Santa María de Guadalupe, igual que juntos hubieran ingresado a la Basílica de Guadalupe, en la Ciudad de México.
“Sean todos bienvenidos a la casita sagrada en la que nuestra madre de Guadalupe congrega a sus hijas y a sus hijos, donde nos enseña a vivir como hermanos y a peregrinar juntos hacia Jesucristo, El Redentor”, fueron las primeras palabras del obispo; agregó que en la ceremonia se recibieron a los peregrinos de manera física como virtual.
Es la segunda ocasión que debe efectuarse la peregrinación de manera virtual, por ello se reconoció a todos los fieles que obedecieron la instrucción de priorizar la vida, se quedaron en casa y desde ella peregrinaron.
Destacó que por 129 años se realizó el recorrido a la Basílica de manera presencial; mientras que la segunda peregrinación virtual demuestra que nada ni nadie puede detener a los fieles, ni siquiera la pandemia.
Lamentó también la violencia que se registra en el país.
Urgió a todos los católicos a visualizarse como lo que son, hermanos, por lo cual todos deben defenderse entre sí, realidad que, consideró, ha quedado más clara derivado de la pandemia. La fraternidad debe quedar como un estilo de vida.
“Nadie ni nada ha podido detenernos, ni siquiera la pandemia del Covid-19, ni el dolor, ni la sangre, ni la muerte…”, expuso López Plaza.
Destacó que la peregrinación concluye dentro de los festejos por el 490 de la fundación de la ciudad de Querétaro.
También portó su indumentaria peregrina, tras lo cual dio la palabra a quienes año con año guían la peregrinación, entre ellos los presidentes de las columnas.
Jaime Rojo Rojo, presidente de la columna masculina, remarcó que los verdaderos peregrinos obedecen, por tanto, únicamente pueden recibir ese nombre quienes se quedaron en sus hogares para peregrinar y vivir su fe en familia.
Dijo confiar que en el 2022 ya México habrá logrado superar la pandemia y se podrá nuevamente recorrer a pie el camino al Tepeyac.
Gabriela Siliceo Valdespino, presidenta de la columna femenina, destacó que gracias al esquema virtual resultó posible que peregrinaran aquellas personas que de la manera tradicional se han visto impedidas de participar.
Al ser peregrinación virtual, dentro de la página de la Diócesis se llevó a los fieles que siguieron la transmisión al recorrido que habrían realizado si la pandemia por Covid no existiera.