El Observatorio Ciudadano de Movilidad estimó que la inversión económica y de tiempo que se destinará en construir el viaducto poniente superará, en mucho, el beneficio que el ayuntamiento de Querétaro pretende conseguir.
Se trata de 11 meses los que el tránsito permanecerá afectado para construir un nodo que será transitado por un contado número de personas, todas dueñas de un automóvil, proyecto que contrasta con la tendencia mundial, que es fortalecer el transporte urbano, así como el uso de medios de transporte alternativo, entre ellos el de la bicicleta, declaró Sergio Olvera León, presidente del observatorio.
Señaló que ese dinero tendría un mayor impacto si, por ejemplo, el municipio capitalino lo invirtiera en establecer su propio transporte urbano. Un servicio colectivo eficiente reduciría la cantidad de vehículos que deben transitar por las vialidades, y no como ocurre actualmente, que las fallas en el transporte colectivo obligan a que cada vez más busquen tener un coche propio.
El tiempo que se proyecta para crear un nodo vehicular resulta excesivo, señala, esto luego de que se informó que las actividades arrancan a inicios de este año, pero concluirán hasta noviembre. Se trata de un tiempo que supera, por mucho las obras en otros países.
“Vamos a tardar 11 meses en un nodo vial que sólo va a servir a los autos; en otros países esto [el viaducto] sirve de colector de lluvia, tiene sensores para información del tránsito, transporte de cables de fibra óptica (...) y aquí solo es para el auto”.
La velocidad con la que circularán los autos en la vialidad también imposibilitará que pueda diseñarse el viaducto para que los ciclistas puedan recorrerlo, aunque sí se debería tenerse en cuenta la construcción de un carril confinado, para que circule por ahí el transporte público urbano.
El observatorio lamentó que el municipio considere que socializar la obra es planearla sin tomar en cuenta a la población de la que se usan los recursos y luego presentarla únicamente a las personas que se beneficiarán con ella.
Afirmó que han buscado, de manera infructuosa, que el alcalde favorezca el transporte urbano, además de fomentar el uso de vehículos alternativos, entre ellos la bicicleta, pero que insistirá en reunirse con la secretaría de Obras Públicas, Oriana López Castillo, para exponerle que en otras partes del mundo se priorizan otras acciones a favor de la movilidad y que, de ser realmente necesario contar con un nuevo nodo, se tomen en cuenta ideas ya existentes para que pueda ofrecer más ventajas a la población.